jueves, 31 de marzo de 2022

Monumentos Naturales de Granada

Una nueva entrada de la serie de artículos, en formato digital, iniciada en Granada Hoy, en esta ocasión dedicada a los  8 Monumentos Naturales 'oficiales' de la provincia de Granada. 

Enlace a artículos anteriores:

Miradas y miradores de la Sierra de Huétor. 

Rincones de Sulayr

Enlace  a Monumentos naturales de la provincia de Granada 👇

 https://www.granadahoy.com/vivir/Monumentos-Naturales-provincia-Granada_3_1669663029.html


Transcribo a continuación la versión original del artículo


Naturaleza ‘Monumental’

Ignacio Henares

La provincia de Granada cuenta con 8 monumentos naturales, de diferentes tipologías, declarados entre los años 2001 y 2019, que van desde las apenas 2 hectáreas del ‘Nacimiento de Riofrío’, el de más reciente declaración, y las cerca de 30 de la ‘Cueva de las Ventanas’, uno de los primeros en su declaración.

Entre las ‘milyuna’ posibilidades de disfrutar del rico y variado patrimonio natural y cultural de nuestra provincia, hay infinidad de rincones que constituyen auténticos monumentos de la naturaleza, pero sólo un selecto grupo forma parte, hasta ahora, del reconocimiento oficial con esta denominación. La ley de Conservación de los Espacios Naturales y de la Flora y Fauna Silvestres considera a los Monumentos Naturales como una categoría de Espacios Naturales Protegidos y los define como “espacios o elementos de la naturaleza constituidos básicamente por formaciones de notoria singularidad, rareza o belleza, que merecen ser objeto de una protección especial, así como las formaciones geológicas, los yacimientos paleontológicos y demás elementos de la gea que reúnan un interés especial por la singularidad o importancia de sus valores científicos, ecoculturales o paisajísticos”.

En Andalucía, con competencia exclusiva en materia de Espacios Naturales Protegidos de acuerdo con nuestro Estatuto de Autonomía, se recogió esta figura jurídica en nuestra normativa y se clasifican los Monumentos Naturales en geológicos, bióticos, geográficos, ecoculturales y mixtos, según el criterio dominante que motive su declaración.

Peña de Castril

Autor: Andrés Iruela

Año de declaración: 2001. Tipología: ecocultural. Superficie: 3,52 ha. Municipio: Castril

La Peña de Castril es un gran complejo geológico de rocas calizas sobre las que se sitúan los restos de una fortaleza árabe y la escultura del Cristo del Sagrado Corazón. Constituye un magnífico mirador desde el que se domina un territorio único que se extiende, al sur, por las depresiones de Baza y Guadix, hasta las estribaciones de Sierra Nevada. Asentada en la margen izquierda del río Castril, se levanta sobre las laderas que desde el altiplano del norte de la provincia de Granada inician la configuración de la Sierra de Castril, antesala de la magna Sierra de Cazorla.

El pueblo de Castril tuvo su origen hace más de 2.000 años en las faldas de esta peña. Castril posee un valioso conjunto histórico-cultural con yacimientos arqueológicos de la época romana y musulmana, entre los que destacan los restos nazaríes y almohades hallados alrededor del Castillo de la Peña. La evolución conjunta de los elementos naturales, junto al patrimonio arquitectónico, ha propiciado un genuino y pintoresco paisaje en que ambos aspectos se encuentran totalmente integrados.

Podemos completar la visita con un paseo por el pueblo y realizando un pequeño recorrido de descenso hasta el profundo cañón de paredes verticales y escarpada topografía hasta llegar al río Castril disfrutando de la riqueza natural de este bello enclave.

Infiernos de Loja

Fuente: Banco de imágenes de Diputación de Granada.

Año de declaración: 2003. Tipología: geológico. Superficie: 2,57 ha. Municipio: Loja

Este paraje se corresponde con un tramo del río Genil con destacados elementos de interés geológico que propiciaron su declaración como monumento natural pero que alberga, además, una rica flora y fauna riparia, y a la que se pueden añadir otros elementos de interés cultural como los yacimientos prehistóricos, “La Esperanza” y “El Manzanil”.

El agua es el agente protagonista del paisaje que ha ido modelando y constituyendo dos niveles de terrazas entre los que fluyen corrientes en forma de cascadas como la denominada ‘Cola de Caballo’. Por otra parte, los manantiales de los acuíferos del Manzanil, Terciado y Frontil provenientes de las Sierras de Loja y del Hacho, vierten sus aguas carbonatadas al Genil. Estas aguas, en algunas zonas y al precipitar los carbonatos, se solidifican pudiendo fosilizar los elementos bióticos, dando lugar a formaciones caprichosas denominadas edificios travertínicos.

Washington Irving calificó estas formaciones como “cavernas tenebrosas que guardan almas en pena” que guarda relación con la denominación popular de ‘Infiernos’ que le dan los vecinos de Loja al lugar y al sendero que desde esta localidad nos adentra en este espectacular lugar.

Peñones de San Cristóbal

Año de declaración: 2001. Tipología: geográfico. Superficie: 2,36 ha. Municipio: Almuñécar

Fuente: Banco de imágenes de Desarrollo Sostenible. JA

Situado en nuestra costa, está constituido por tres afloramientos rocosos y las franjas de agua que quedan entre ellos. Reciben los nombres de Peñón de Fuera, Peñón de Enmedio y Peñón del Santo, este último asentado ya en la misma playa a la que separa en dos: la playa de Puerta del Mar a oriente y la de San Cristóbal a poniente.

El Peñón del Santo es el más grande de los tres y el que alcanza una mayor altura, unos 30 metros. Se puede recorrer por un pequeño sendero hasta la zona más elevada donde se encuentra la Cruz del Santo y un mirador con estupendas vistas al mar, a la ciudad de Almuñécar y a las estribaciones de las sierras de La Almijara y Los Guájares. Este fue el lugar donde Abderrahman I (último superviviente de los Omeyas y fundador de Córdoba), en el año 755, tocó por primera vez tierra peninsular, pero es más famoso por ser el escenario donde tiene lugar el entierro ficticio de ‘Chanquete’ en la mítica serie de televisión Verano Azul.

Además de esta función de mirador privilegiado es un espacio de gran interés para la avifauna marina ya que en él viven colonias de diferentes especies de gaviotas (patiamarillas y sombrías), charranes y alcatraces en invierno así como numerosos ejemplares de cormoranes.

Cueva de Las Ventanas.

Fuente: Banco de imágenes de Desarrollo Sostenible. JA

Año de declaración: 2001. Tipología: ecocultural. Superficie: 27,91 ha. Municipio: Píñar

La Cueva de las Ventanas se localiza en la localidad granadina de Píñar, en los tajos intermedios de un cerro de material calizo modelado por procesos kársticos. La circulación del agua da lugar a procesos de erosión y a la disolución lenta de las rocas de naturaleza calcárea, modelando el interior de la montaña con numerosas cuevas y galerías. Al cristalizar de nuevo los materiales dan lugar a formaciones conocidas como estalactitas, estalagmitas, columnas y coladas.

Con una longitud de 1.200 metros y una altura máxima de 38, se compone de varias salas de diferente tamaño. Tras la estrecha entrada se tiene acceso a la “Gran Sala” donde en época prehistórica se desarrollaba la vida cotidiana de los pobladores. Otros espacios interiores son conocidos como Sala de los Desprendimientos, de la Pileta, Gran Cima (que incluye una curiosa formación denominada la Campana), del Tesorillo o Gruyere.

En su interior se han localizado restos de animales prehistóricos y vestigios de diversas culturas del Neolítico con más de 20.000 años de antigüedad. Un paseo por sus entrañas nos traslada al modo de vida en la Prehistoria donde estas cuevas fueron utilizadas como refugio de las inclemencias del tiempo, de los animales salvajes o de eventuales enemigos.

Tajos de Alhama de Granada

Fuente: Banco de imágenes de Diputación de Granada.

Año de declaración: 2011. Tipología: mixto. Superficie: 25,79 ha. Municipio: Alhama de Granada

En palabras del poeta francés Teophile Gautier, Alhama está “colgada de una enorme roca”. Esta expresión nos sitúa aproxima al lugar y significado de este Monumento Natural, de gran valor paisajístico y geológico, formado por un impresionante conjunto de cañones y tajos de areniscas y conglomerados modelados por el río Alhama, con una profundidad que supera los 50 metros. El paraje se encuentra además catalogado como Paisaje Sobresaliente en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz. Tiene además gran importancia ecológica por albergar un conservado bosque de galería y poseer una flora y fauna ligada a este peculiar hábitat rocoso.

A su belleza natural indiscutible se suma una dimensión histórica y etnográfica de gran interés ya que Alhama fue un símbolo de la conquista cristiana del Reino de Granada.

Se recomienda recorrer los Tajos por la zona alta para continuar por el ‘camino de Los Ángeles’, bajo los taludes, junto al río y en dirección al casco urbano, y así poder contemplar desde diferentes perspectivas la inmensidad de sus paredes que caen a plomo sobre almendros y otros cultivos. La visita debe culminar con un paseo por el barrio antiguo de Alhama y al famoso Balneario, al que la localidad debe, no en vano, el nombre (Al-Hamann = el baño).

Cárcavas de Marchal

Fuente: Banco de imágenes de Desarrollo Sostenible. JA

Año de declaración: 2003. Tipología: geológico. Superficie: 5,22 ha. Municipio: Marchal

Situado en la Hoya de Guadix en el extremo sur del Geoparque de Granada y flanqueado por elevadas cadenas montañosas que lo aíslan y le confieren un clima de carácter continental, se encuentra un espectacular paisaje, de gran belleza, caracterizado por formaciones acarcavadas producidas por la acción erosiva del agua sobre colinas arcillosas, con cuevas artificiales acondicionadas a lo largo de la historia como viviendas. Este sistema se formó por movimientos de placas terrestres que provocaron el hundimiento de esta zona, dando origen a una fosa tectónica. Esta depresión, con el paso del tiempo, se fue rellenando de materiales blandos, arcillas y limos en su gran mayoría.

Debido a la escasa vegetación, a las lluvias de tipo torrencial frecuentes en la zona y al arrastre de materiales, se fue creando un paisaje de barrancos, regueras y profundas zanjas que dan lugar a formaciones de tonalidades marrones, ocres, verdes y oscuros que constituyen un conjunto de gran atractivo visual. Son conocidos con el término de bad-lands (‘malas tierras’), ya que no son aprovechables para la agricultura.

La localidad cuenta con una red de miradores desde donde disfrutar de las maravillosas vistas del entorno con evocadores nombres como Mirador de la Ermita de las Ánimas, el Mirador de la Encantada, el Mirador del Santo Cristo de los Milagros, el Mirador del Peregrino… así como varios senderos y rutas en bicicleta o a caballo.

Falla de Nigüelas

Fuente: Banco de imágenes de Desarrollo Sostenible. JA

Año de declaración: 2001. Tipología: geológico. Superficie: 7,6 has. Municipio: Nigüelas

Este colosal accidente geográfico tiene un elevado valor científico, es un extraordinario recurso didáctico y constituye un atractivo adicional para la variada oferta de ecoturismo de la comarca. La falla discurre por el extremo occidental de Sierra Nevada, sobre la base de las Sierras de Dúrcal, al este, y del Manar, al oeste, y es bien visible, incluso a gran distancia, entre los pueblos de Nigüelas y Padul. El plano de falla, que aparece como un enorme espejo de roca grisácea y amarillenta, constituye uno de los mejores ejemplos visibles, y más accesibles, de estas estructuras tectónicas en toda nuestra geografía provincial.

Las rocas corresponden a materiales carbonatados del Complejo Alpujárride formados en el periodo Triásico, hace unos 225 millones de años, en el fondo del Mar de Thetys. El origen de la falla es bastante reciente, geológicamente hablando, puesto que empezó hace unos 7 millones de años en el periodo conocido como Tortoniense, y se ha activado en varios episodios, proceso que continúa de manera muy lenta en la actualidad.

Tras visitar este peculiar Monumento Natural es obligado un paseo por las calles de Nigüelas, el ‘balcón del Valle de Lecrín’ y recorrer las casas moriscas, aljibes y la torre nazarí. No debemos perdernos la casa señorial de los Zayas, con su portada renacentista y su bello jardín de estilo romántico francés, hoy sede del ayuntamiento, y la Almazara de Las Laerillas, único molino aceitunero del siglo XIV que queda en España.

Nacimiento de Riofrío.

                                        Autor: Fernando Rodríguez.

Año de declaración: 2019. Tipología: mixto. Superficie: 1,89 ha. Municipio: Loja

A un par de kilómetros aguas arriba del núcleo urbano de la pedanía de Riofrío, encontramos este Monumento Natural, el de más reciente declaración en nuestra provincia, formado por un grupo de nacimientos de agua que se extienden a lo largo de 500 metros, un fenómeno que en geología se denomina borde de descarga. Provienen de corrientes subterráneas de Sierra Gorda que afloran para aliviar la presión del interior de la tierra, una especie de válvula de escape para dejar salir el agua y evitar el colapso de los acuíferos. Aguas rápidas, tumultuosas y efímeras que podemos contemplar en épocas de intensas lluvias. Los geólogos le llaman ‘trop plein’ y es un fenómeno hidrológico difícil de observar porque son realmente escasos los lugares donde se produce de forma visible.

Desde el punto de vista biótico, destaca por la pureza de sus aguas, lo que facilita la presencia de una variada ictiofauna en la que destacan las truchas, pero también anguilas, bogas de río, carpas…En cuanto a sus valores ecoculturales, el nacimiento de Riofrío conforma un frondoso bosque galería en el que se inserta un conjunto industrial abandonado con molinos hidráulicos y fábricas de cobre, un ejemplo de la arqueología industrial del siglo XVIII, utilizado hasta el siglo XX.

martes, 8 de marzo de 2022

De nuevo escribo un artículo sobre cambio climático, en este caso tras el último informe del panel de Expertos del IPCC. Agradezco a El Independiente de Granada que me brinde 'alojamiento' en su web. 

Lo he titulado Época de Cambios, Cambio de Época y lo he difundido con el siguiente mensaje: "Podemos hacer caso a los negacionistas de turno o a los expertos 'todólogos' de las tertulias de la radio o de la tele pero las evidencias científicas son inequívocas.  

Enlace a la edición digital: 'Época de cambios, Cambio de Época' | El Independiente de Granada


Época de cambios, Cambio de Época.

Ahora que la evolución de la pandemia evoluciona favorablemente ¿hacia la endemia o gripalización? nos cae la invasión rusa de Ucrania y sus lamentables consecuencias sociales y económicas, de imprevisible alcance. En este contexto de mayor incertidumbre, si cabe, se ha hecho público un nuevo informe, (una nueva advertencia), del IPCC (Grupo Intergubernamental de Expertos en Cambio Climático) sobre los impactos del cambio climático en el planeta, estudio que complementa el publicado el pasado verano referido a las bases físicas del cambio climático y el efecto que los humanos, y nuestro modelo insostenible actual de producción y consumo, tenemos sobre el sistema climático.   Así lo aseveraba en sus conclusiones: “el calentamiento global del planeta se debe a la acción humana que tiene como consecuencia que se haya desencadenado un incremento en la intensidad y frecuencia de los fenómenos meteorológicos extremos”.

No estamos ante un informe, un documento científico más. Son las conclusiones del grupo de 270 científicos (que implican a miles de investigadores) de unos 70 países que han revisado para la ONU más de 34.000 artículos. Esta segunda parte del informe de evaluación recoge los datos más actualizados relativos a los impactos del cambio climático, los riesgos y las vulnerabilidades frente a este fenómeno.  Los expertos del IPCC, una institución creada bajo el paraguas de la ONU en 1988, confiesan, ocho años después de la última gran revisión global, que se quedaron cortos en sus pronósticos y que el alcance y la magnitud de los impactos del cambio climático son mayores de lo que estimaban en evaluaciones anteriores. El planeta está cada vez más cerca de su punto de no retorno, y apenas queda tiempo para enderezar el rumbo.

La evidencia científica acumulada es inequívoca: el cambio climático es una amenaza para el bienestar humano y la salud planetaria y algunas pérdidas son ya irreversibles, como la extinción local o total de algunas especies,  y otros impactos se acercan a la irreversibilidad, como es el caso del blanqueamiento de los corales o el retroceso de los glaciares y la pérdida del permafrost -suelos permanentemente helados en las regiones árticas.

El informe detecta ya cambios, algunos de ellos irreversibles, en los ecosistemas del planeta por los fenómenos climáticos extremos relacionados al calentamiento global causado por la actividad humana. Pero lo peor es las proyecciones de estos efectos en el futuro. En estos momentos la mitad de las especies terrestres, están en peligro. Cerca de la mitad de las especies animales y vegetales terrestres, en el peor de los escenarios, corren un alto riesgo de extinción a lo largo del siglo a causa del cambio global.  Incluso en los escenarios más optimistas, con una subida media de la temperatura de sólo 1,5ºC,  se prevé una extinción que oscilaría entre el 5 y el 15% de las especies. Las especies endémicas (aquellas que habitan en un único ámbito geográfico) están especialmente amenazadas: el cambio climático podría llevar al fin de todas las especies de este tipo en pequeñas islas, al 84% en las de montaña, al 54% en los océanos y al 12% en los continentes, según alerta el documento del IPCC.

Más allá del impacto en los ecosistemas, los efectos del cambio climático afectan directamente a la economía, muy especialmente con los sectores que tienen una exposición directa al clima como como la agricultura, la silvicultura, la pesca, la energía o el turismo. Y para más inri, según las conclusiones del informe, el calentamiento global tiene repercusiones en el ámbito de la salud física y mental. Esta última se ha visto especialmente afectada a consecuencia del aumento de las temperaturas, ya que los eventos extremos pueden provocar traumas, que se unen al efecto negativo que la pérdida de medios de vida y de la cultura derivada del cambio climático tiene en las personas. Como colectivos especialmente vulnerables a los impactos del cambio climáticos sobre la salud, el informe señala a la infancia, las mujeres, las personas ancianas o con menos recursos económicos.

Quisiera poner el acento en otro de los apuntes del estudio publicado que se refiere a la asimetría del impacto del cambio climático ya que, si bien nos afecta a todo el planeta, hay sectores que están siendo golpeados mucho más fuerte, según la región en la que viven. No todos somos igual de vulnerables. Así podemos destacar que hay entre 3.300 y 3.600 millones de personas, (cerca de la mitad de la población mundial) que viven en contextos considerados altamente vulnerables al cambio climático, por su ubicación geográfica o por su mala situación socioeconómica lo que ha llevado a que, por ejemplo, entre 2010 y 2020, 15 veces más personas murieran a causa de inundaciones, sequías y tormentas en regiones muy vulnerables -partes de América Central y del Sur, de África, y del sureste asiático- que en otras partes del mundo.

Del mismo modo habría que incidir en la debilidad de la región mediterránea en general y de nuestra Región andaluza en particular. El informe no sitúa entre las zonas de mayor fragilidad señalando que la productividad agrícola podría caer un 17% para 2050 si se mantiene un nivel alto de emisiones de CO2, ya que los escenarios climáticos que se barajan prevén una reducción de las aportaciones hídricas asociada a subidas de las temperaturas. Ya en este siglo acumulamos varios récords de temperaturas medias y absolutas. A los impactos se sumaría que el nivel del mar podría subir entre 20 centímetros y más de un metro en la región mediterránea, donde un un 37% de la costa estaría afectada. Los daños causados por las inundaciones costeras se multiplicarán al menos por diez a finales del siglo XXI.

De la misma manera que sabemos que cada décima de aumento de la temperatura incrementa los impactos, los esfuerzos para contenerlo, los recortes de emisiones de gases de efecto invernadero y las medidas de adaptación suponen una posibilidad de avanzar hacia un futuro habitable y sostenible para todos.

Estamos en un punto crucial, en un momento clave. Esta década debe ser de acción. De ahí la importancia de que la recuperación económica no sea una ‘vuelta a las andadas’ de un modelo de producción y consumo insostenible. No podemos caer en la tentación de un desarrollo basado en el modelo económico que nos ha traído a la situación actual. Debemos apostar por una transición ecológica, justa, hacia una economía circular baja en carbono.

Debemos ser conscientes de que cuanto más tardemos en reorientar nuestra economía, más costoso, y más doloroso será. Si somos capaces de mantener las temperaturas por debajo de incrementos de 1,5 °C,  en la línea de los Acuerdos de París, se reducirán las pérdidas proyectadas y se podrá evitar lo peor. El futuro no depende del clima, depende de lo que nosotros hagamos con el clima.