sábado, 30 de junio de 2018

Las lagunas como tarjeta de Presentación (Carrillo)

Uno de los objetivos que me he propuesto con la serie de entrevistas/reportajes "Paisaje y Paisanaje" en el periódico Granada Hoy es visibilizar a mujeres relacionadas con Sierra Nevada y para ello esta semana he traído a una gran científica, compañera de mi promoción que lleva muchos años trabajando en las lagunas de alta montaña, especialmente en las nevadenses.

Enlace a la edición digital:

https://www.granadahoy.com/granada/Presentacion-lechugaLas-PresentacionEjemplo-tenacidad-perseverancia_0_1259274274.html

Y así me quedó la versión impresa:


SIERRA NEVADA, PAISAJE Y PAISANAJE

PRESENTACIÓN CARRILLO LECHUGA
Las lagunas como tarjeta de ‘Presentación’

Catedrática del Departamento de Ecología y Directora del Instituto del Agua.
Su investigación está ligada especialmente a las lagunas de alta montaña de Sierra Nevada.

PERFIL

'Pre' Carrillo es compañera de mi promoción en Biología y la charla con ella es especialmente fácil, directa y plena de complicidad. En 1989 defendió su tesis doctoral con una calificación de cum laude y el premio extraordinario de doctorado. Posteriormente consigue becas post-doctorales y realiza una estancia en el Istituto  Italiano di Idrobiologia. A mediados de los 90, obtiene la plaza de profesora titular del Área de Ecología, y en el año 2011 logra la cátedra.

En la última década su trabajo se ha centrado en lagos y lagunas de los parques nacionales españoles de montaña, siguiendo distintas aproximaciones que incluyen análisis moleculares, fisiológicos y estequiométricos para evaluar los efectos de múltiples factores de estrés global sobre las interacciones planctónicas en redes tróficas acuáticas. Conocí más de cerca su pionero trabajo en el mundo de las lagunas glaciares cuando fue la investigadora principal del estudio de estrategias adaptativas en especies clave en ecosistemas de alta montaña en Parques Nacionales. 


ENTREVISTA

Para los que no son expertos ¿cuál es el origen de las lagunas de Sierra Nevada?  Las lagunas de alta montaña son el fruto de un  tardoglaciarismo suave de retroceso de hace unos 10.000 años  que  remodeló circos y cuencas glaciares próximos a  la línea de cumbres (entre los 2.600 y los 3.100 m de altitud). Las lagunas  se formaron por llenado de esas cubetas y a lo largo de este tiempo muchas de ellas han ido experimentando un proceso natural  de evolución hacia lagunas  someras, zonas encharcadas y borreguiles.

¿Qué tienen de especial nuestras ‘lagunas de altura’? Presentan  características muy singulares, al estar a la mayor  altitud  y en el punto más meridional de Europa hasta donde llegaron las glaciaciones. Su localización determina que tengan  largos períodos libre de hielo (entre 3 y 5 meses) y  esto lo que les confiere un papel de vigía de  los fenómenos  que acontecen en la atmósfera. Las lagunas glaciares son auténticos laboratorios naturales; hoy utilizamos la metáfora de que son como ‘bolas de cristal’ porque su estudio nos  permite anticipar  lo que puede ocurrir en el futuro  en altitudes más bajas e incluso en otras latitudes.

¿Qué te llevó a estudiar sobre ellas?  Queríamos conocer cuestiones fundamentales en ecología: las interacciones tróficas entre las algas y los herbívoros 'los famosos bichitos rojos'  que nadan por todas las lagunas. Pretendíamos saber quién se come a quién  y cómo se regulaban las redes tróficas… si se trataba de fuerzas de arriba–abajo (por depredación) o de fuerzas abajo-arriba (por los nutrientes). Los  hoy ya famosos, entre nuestros alumnos,  mecanismos de regulación top-down versus bottom-up.   Pues bien, las lagunas de Sierra Nevada  son un laboratorio natural ‘ideal’  donde probar y avanzar en los que eran entonces los nuevos paradigmas en la investigación en Ecología.  Gracias a estos trabajos iniciales, y a todo lo que hemos  seguido investigando,  hoy  podemos conocer, cómo el cambio global está afectando a nuestras lagunas y su impacto en la diversidad específica o funcional.


¿Cómo surgió la vocación por estudiar, por investigar las lagunas? Pues mi vocación creo que entronca con mi gusto por  el misterio y  lo oculto, (risas). A mí me gusta indagar sobre cuestiones complejas y las redes tróficas acuáticas me han ofrecido esta oportunidad (risas). Bien, la realidad es que me apasiona estudiar los organismos que no se ven,  yo soy más de la ‘cripto-gamia’  que de la ‘fanerogamia’. Siempre me ha fascinado  descubrir qué  ocurre en ese mundo microscópico que funciona a toda velocidad y que  acumula  los cambios que ocurren en la atmósfera y en las tierras circundantes… Yo concibo las  lagunas  como el  corazón, y la dinámica de sus poblaciones  representan el ritmo cardíaco del área donde se ubican… por eso las lagunas podemos decir que miden el pulso de la Tierra. 

¿Qué personas te marcaron en tu formación?  Mi trabajo de investigación se inició de la mano de  Luis Cruz y Pedro Sánchez como directores de mi Tesis, con la estrecha colaboración de Rafael Morales, así que  tuve el mejor triunvirato en este campo. Particularmente agradezco tuvieran la genial idea de enviarme a un curso de Limnología Superior dirigido por el padre de la Ecología, Ramón Margalef. Esta experiencia fue decisiva para mí, supuso un  giro radical  de mi Tesis e incluso de mi perspectiva científica. No obstante, no puedo dejar de nombrar al catedrático de la UGR Regino Zamora  que, no siendo especialista en ecosistemas acuáticos,  me marcó decisivamente en mi aproximación a la Ciencia y en la devoción por el trabajo consistente y robusto. Me enseñó, entre otras muchas cosas,  el valor de la perseverancia.

¿A la vez tú has creado equipo?  Prefiero decir que he  acompañado a gente en los primeros pasos de su  carrera. Afortunadamente ya son doctores que están desarrollando sus brillantes carreras como docentes, profesores de universidad o investigadores en distintos centros. Igual que tuve suerte en mis profesores he tenido mucha suerte con el equipo de trabajo que se ha ido formando pues todos  consiguieron premio extraordinario en sus tesis doctorales. 


Las lagunas de alta montaña dan para mucha investigación, ¿qué especialidades confluyen? Las aproximaciones al estudio de las lagunas glaciares  son múltiples y  muy transversales. Hay grupos en la línea de Hidrogeología y Geomorfología, Limnología Física, Biodiversidad y  Ecología de Poblaciones, Estequiometría y Biogeoquímica. Finalmente,  cuando el objeto es evaluar, en la actualidad,  el impacto de múltiples factores sobre las lagunas y  el objetivo es  anticipar su futuro, estamos abordando trabajos multiescala y analizando la interacción de  múltiples factores de estrés relacionados con el cambio global  (radiación ultravioleta, incremento de temperatura, incremento de intensidad y frecuencia en la deposición del polvo sahariano) sobre las redes tróficas y los  ciclos biogeoquímicos. 

La Universidad de Granada tiene una larga historia de estudio en las lagunas nevadenses, esto supone una gran ventaja para los estudios de cambio climático. Indudablemente, la sinergia entre grupos de investigación para estudiar las lagunas de Sierra Nevada analizando  la biodiversidad, los procesos físicos, los ciclos biogeoquímicos,  las respuestas a eventos extremos, los intercambios de CO2 entre el agua y la atmósfera siempre es un valor añadido para la Ciencia, para el Parque Nacional de Sierra Nevada y para el Observatorio de Cambio Global.

¿Qué es lo último que habéis descubierto?  Lo último en este campo acaba de ser publicado por Scientific Report una revista prestigiosa del grupo Nature. Hemos determinado que en los últimos diez años  la frecuencia e intensidad de intrusiones de polvo saharianos se ha duplicado y que la temperatura media del agua  se ha incrementado un grado (más que la media de temperatura a escala global) y  estos factores de  cambio global, junto con los altos niveles de radiación ultravioleta,  son los responsables directos  de  incrementos en la producción de algas verdes y la pérdida  de algas mixotróficas (organismos que son mitad planta alga-mitad animal) que hacían de estos lagos sistemas energéticamente muy eficientes. La disminución  de Chromulina nevadensis, una especie mixotrófica clave en estas redes tróficas, modifica fundamentalmente el funcionamiento (flujo de Carbono) de las  lagunas. 

Recientemente se ha lanzado una campaña de ciencia ciudadana sobre las lagunas de Sierra Nevada denominada ‘74 Oasis Glaciares de Alta Montaña’. ¿En qué consiste?  Todo el conocimiento que poseemos de las lagunas está disponible de forma muy amable y asequible para la ciudadanía a través del portal lagunasdesierranevada.es, queremos dar a conocer al gran público cómo son estas joyas glaciares que tenemos en Sierra Nevada.   Mi compañero Manuel Villar es el principal impulsor del lanzamiento de esta campaña que es muy atractiva y muy formativa para cualquier ciudadano y que indudablemente ayudará a cuidar las  lagunas porque protegiéndolas nos protegemos frente al cambio climático, a la vez que aportará mayores datos a los científicos para su estudio y el seguimiento de su evolución.

Mucha gente no comprende la prohibición del baño en las lagunas en el parque nacional, ¿cómo les explicarías el impacto que puede producir sobre las comunidades biológicas? Las lagunas son ‘bolas de cristal’ también en el sentido de que son frágiles, ‘se rompen’ con facilidad.  Las lagunas tienen aguas muy transparentes y esto hace que la radiación ultravioleta atraviese la columna de agua. Los organismos para  evitar esa radiación dañina durante el día se van al fondo de las lagunas; si nos bañamos y removemos esos  fondos se está forzando a que los organismos se expongan a la radiación e incrementando la probabilidad de daño celular  y muerte de esos organismos. Además el pisoteo puede directamente aplastar a muchos organismos y liberar nutrientes retenidos en los sedimentos favorecen la ‘eutrofización’. Estas lagunas son ecosistemas muy vulnerables y por ello hay que ser muy, muy respetuosos.

¿Cómo es el trabajo de investigación en las lagunas? No puedo ser objetiva. Es muy, muy bonito, lo mejor del mundo. Imagínate estar en una barca a 3.000 m. Una delicia. Claro que es duro, porque necesitamos transportar mucho material, andar un par de horas cargados  y trabajar con mucho  estrés para poder llegar a la Facultad a procesar las muestras con rapidez y realizar los análisis. Como los organismos, también los investigadores estamos bajo múltiple estrés ambiental (ja,ja). Sin embargo la recompensa científica es extraordinaria, nuestros estudios en reiteradas ocasiones evidencian que las lagunas de Sierra de Nevada son tan singulares,  que su biodiversidad y las respuestas de los organismos a la temperatura, la radiación ultravioleta…  son más parecidas a las encontradas en las lagunas de la Antártida que a las de las altas montañas de Europa. 


¿Has dormido a pie de laguna, por “necesidades del servicio”? Sí, claro que sí. Una parte de nuestros trabajos ha sido estudiar los ciclos diarios de movimiento y actividad de los organismos. Y claro, requiere muestrear de día y de noche. Es una experiencia increíble. Todos los amantes de Sierra Nevada saben cómo es su cielo en verano. La Vía Láctea, lluvias de estrellas… Imagínate al pie del Mulhacén dentro de una barca en la Laguna de La Caldera  sin contaminación lumínica…  Una pasada, una experiencia única. No hay nada más…

Ejemplo de tenacidad y perseverancia. El famoso 'eureka', (“lo he descubierto”) atribuido a Arquímedes ha generado la imagen de que los 'inventos', los descubrimientos científicos,  surgen por momentos de inspiración, bombillas que se encienden, 'chispas'; pero detrás de una brillante carrera investigadora como la de Pre Carrillo hay un largo trabajo, constante, metódico, arduo, en el que hay que superar muchas dificultades de diversa índole. A ellas se ha enfrentado aplicando una sentencia atribuida a Robert Frost que marca su carácter, su espíritu de superación, en el plano personal y en el científico: “En dos palabras puedo resumir cuanto he aprendido acerca de la vida: sigue adelante”.

En su página web, que es tanto como decir 'grabado en la frente',  hay además otra cita que resume esa actitud positiva, luchadora ante los problemas: Where there’s a will there’s a way, es decir, cuando hay voluntad hay un camino (una solución).


domingo, 24 de junio de 2018

Alberto Tinaut. Nominado y nominando.

Uno de mis profesores, de mis maestros, en la carrera y después, a lo largo de todos estos años ha sido Alberto Tinaut, al que he dedicado esta semana mi entrevista/reportaje que he titulado en esta ocasión "Haciendo grande el estudio de lo pequeño"

Así me ha quedado la entrevista en la versión digital:

https://www.granadahoy.com/granada/Haciendo-estudio-pequenoAlberto-raneraNominando-nominado_0_1257174809.html

Y así el reportaje completo en la versión impresa:



Sierra Nevada, Paisaje y Paisanaje



Alberto Tinaut Ranera







Haciendo grande el estudio de lo pequeño



“En el principio fue la montaña” la que ejerció una atracción en Alberto Tinaut, cuando todavía era muy pequeño. Luego vino el interés por la fauna, especialmente los insectos y otros invertebrados. Ambas aficiones se unieron de manera indisoluble en su vida, encontrando en Sierra Nevada el espacio ideal para poder dedicarse con pasión a ellas.



En Sierra Nevada ha escalado casi todos los tres miles, ha practicado esquí alpino y de travesía, bicicleta de montaña…. Además de ‘patearse’ toda Sierra Nevada ha recorrido y estudiado otras montañas españolas como los Pirineos, Picos de Europa, Gredos... Fuera de España,  ha estado en el Atlas, los Alpes y los Andes, tanto en la parte del Ecuador como en Perú. No presume de 'montañero' pero está muy feliz de todas sus conquistas aunque lamenta que le han quedado muchas por descubrir.




ENTREVISTA.



Alberto Tinaut es un investigador, admirado y querido por todo el ‘mundillo bichológico’, un grande de la Entomología española, como las montañas que tanto ama. Como persona es de una extraordinaria sencillez y humildad, que no puede esconder sin embargo su fecunda actividad investigadora (más de 150 artículos científicos) y divulgativa con numerosas publicaciones entre las que podemos destacar la coordinación de la Enciclopedia sobre Fauna de Andalucía. Su contribución al conocimiento de muchos insectos es de gran importancia. Yo he sido uno de los más de 6000 alumnos que ha bebido de esas fuentes y de los inoculados por el interés por estos animales, aparentemente, menos atractivos.



¿Cuándo surge tu vocación como zoólogo? No sabría decirlo, desde pequeño, como a la mayoría de los niños, me gustaban los animales y en mi casa, mis padres apoyaban (y sufrían) esa afición. El interés por los animales y mi amor a la montaña se complementaron.



¿Cómo eran aquellos primeros años de investigación en Sierra Nevada? En los años 70 la Sierra aún era visitada por pocas personas y por tanto tenía una aureola más ‘salvaje e indómita’. Era menos accesible y había que quedarse varios días en la montaña para completar los muestreos. Iba con una mochila suficientemente cargada de alimento, ropa y el material de trabajo. Las Alegas, Siete Lagunas, Vacares, etc, eran parajes bastante solitarios… resultaba infrecuente encontrarse con alguien después de 2-3 días de estancia. Era emocionante esa sensación de lejanía y de soledad, de la que a veces no quería desprenderme y que en ocasiones agradecía pues no era fácil explicar qué hacía un muchacho en lo alto de la Sierra cogiendo hormigas o algún otro insecto.



Ha cambiado mucho la Sierra y la forma en la que se hace investigación en ella. Los principales cambios que se han producido yo los observo en el procesado del material recogido ya que los sistemas de lupas o microscopios han mejorado bastante; el uso del microscopio electrónico es algo habitual, incluso, salvando el tema económico, las técnicas de secuenciación genética están relativamente al alcance. Todo esto te permite acceder a otros interrogantes y a otras respuestas en consecuencia.



Insectos y Sierra Nevada.



Hablamos de la importancia de la biodiversidad animal en Sierra Nevada. Haciendo recuento en el grupo de los insectos comprobamos que están inventariadas ahora mismo 3.750 especies lo que supone la mitad de las conocidas de Andalucía y casi el 20 por ciento de la Península Ibérica.  Ello indica que en un porcentaje de territorio relativamente pequeño tenemos una gran concentración de especies, lo que convierte al parque nacional y natural en 'hotspost', un punto caliente en biodiversidad, en la Región Mediterránea.



¿Queda mucho por descubrir en los insectos de Sierra Nevada? Mucho. Se calcula que la mitad de las especies presentes aún no están citadas. Es raro el año que no se describen especies e incluso géneros nuevos. Hay muchos grupos que están bastante poco estudiados, por falta de especialistas y/o por falta de financiación.



¿Cuáles son los insectos nevadenses mejor conocidos? Realmente bien conocidos a nivel taxonómico, podíamos decir que hay muy pocos. Quizás algunas familias pertenecientes a los coleópteros, sean las mejores conocidas, junto a algunos grupos de insectos ligados con medios acuáticos y las mariposas diurnas. Por supuesto y aunque esté feo decirlo, al ser motivo de mi tesis doctoral y uno de los grupos que más he estudiado,  las hormigas,  se conocen bastante bien, aunque siempre surgen sorpresas.


Por el contrario, ¿cuáles son los más desconocidos?  Los dípteros,  la mayor parte de las mariposas nocturnas, o algunas familias de himenópteros, por citar grupos importantes, están en su mayor parte sin estudiar. En general podemos afirmar que en entomofauna se desconoce más de lo que se conoce. Algunas estimas que he realizado sitúan el número de insectos en Sierra Nevada en torno a las 12.000 especies.



Algunos protagonistas de sus estudios



La mariposa Apolo, un símbolo e icono de Sierra Nevada, es una de las especies que has estudiado en profundidad. Esta mariposa es una especie muy curiosa. Empezando por su diseño y coloración, con las manchas negras y los ocelos color vinagre y su gran tamaño. Es un ejemplo de una especie que vino con el frío y se quedó colgada en las alturas, en un sitio que realmente no le correspondía. En el norte de Europa la podemos ver a orillas del mar o en praderas a baja altitud. En el sur  esta especie sobrevivió refugiada en las zonas frías, pero en estos sitios es un inquilino forzoso.




Las especies de mariposas propias de la montaña son tienen tamaño y alas pequeñas que le permiten volar a ras de suelo, casi elevarse más alto que las piedras que les cortan el viento; es la misma estrategia de las gaviotas que vuelan pegadas a las olas cuando el viento arrecia. Sin embargo la Apolo de gran envergadura alar apenas si puede remontar o dirigir su vuelo cuando hace viento, algo frecuente en las zonas altas y desprovistas de vegetación arbórea, siendo a veces arrastrada por alguna ráfaga u obligada a permanecer inmóvil en alguna planta o en el suelo. Ese carácter de mariposa procedente del frío, la hace muy sensible a los cambios climáticos y de usos del suelo y por tanto un buen bio-indicador. Su biología apenas estaba estudiada y hemos podido conocer su diversidad genética, la existencia de flujo génico entre poblaciones más o menos distantes, su desarrollo fenológico, plantas alimenticia.



Una vez te escuché una charla denominada ¿Qué hace una hormiga como tú en un sitio como este? dedicada a las ‘hormigas esclavistas'. Ha sido uno de tus principales campos de investigación. Este  tipo de comportamiento de algunas especies de hormigas me ha llevado más de 20 años de mi investigación. Es un comportamiento que parece irreal, pensar que una sociedad de hormigas viva a costa de otra especie a la que secuestra en sus fases más juveniles para llevarlas a su hormiguero y que, una vez lleguen a adultas, se dediquen a cuidar y alimentar, no sólo a las larvas y huevos de la especie parásita, sino también a las obreras y reina de la especie parásita… Y sobre todo que las obreras de la especie parásita formen un ejército cuya única misión es salir al exterior a asaltar de vez en cuando nuevos hormigueros de la especie hospedadora, parece más fruto de la imaginación de un guionista de ciencia ficción que algo que ocurre en la vida misma, pero así es.

 

Se conocen más géneros y especies pero el género con el que hemos trabajado en la Universidad de Granada, el género Rossomyrmex, es muy singular por varias cuestiones. Primero porque se conocen en escasas localidades, aunque está muy distribuido. En Europa sólo se ha citado en algunas montañas béticas y recientemente en la Sierra de Guadarrama y no vuelve a aparecer hasta las llanuras de Anatolia (Turquia), cerca del Mar Caspio, Kazajstán y China, con sólo cuatro especies a nivel mundial. Además su comportamiento es, aparte de los asaltos, realmente singular, tanto en los mecanismos de orientación y búsqueda de hormigueros, como en su reproducción, muy organizados y no conocidos en otras hormigas.



¿Qué te movió a interesarte por las especies de las cuevas? Las cuevas son ambientes biológicamente muy desconocidos y con una gran dificultad para su estudio, dos ingredientes necesarios para descubrir lo que hay en su interior.. La dificultad del estudio estriba en que algunas cavidades exigen un esfuerzo físico y técnico que a veces te hace plantearte si vale la pena, pero hasta el momento, al final siempre ha ganado la curiosidad. Ha sido también una actividad que me ha llevado muchos años, alternando con otras investigaciones. Su estudio ha sido muy productivo y me ha proporcionado lazos académicos y afectivos con mucha gente del mundo de la espeleología.  



Las especies troglobias son una fauna de otro mundo. Taxonómicamente es muy diversa, fundamentalmente insectos, pero también miriápodos y arácnidos, lo que la hace difícil de estudiar al tener que contar con especialistas de campos muy diversos.  Son formas bien adaptadas a este ambiente,  de aspecto elegante, largos apéndices, ciegas, de color miel que a veces permite ver algunos órganos internos; no distinguen el día de la noche y su ritmo es casi constante pero lento, pausado, aunque algunos pueden correr muy rápido gracias a sus largas patas. En el comienzo de lo bioespeleología se pensaba que las cuevas andaluzas no tenían mucho interés, en comparación con las del Pirineo o del Levante. Hoy día se conocen más de 500 especies habitantes de las cuevas, la mayor parte de ellas endémicas y en algunos casos géneros o incluso familias exclusivas, lo que nos habla de una larga historia evolutiva encerrada en el subsuelo.



Nominando y siendo nominado: Su dilatada trayectoria de estudio de especies le ha llevado a describir varias nuevas y a bautizarlas, como el coleóptero Tinautius troglophilus, el diplópodo Acipes andalusius  y el pececillo de plata Coletinia tinauti.


A la vez otros investigadores le han puesto en su honor el apellido Tinaut a especies que han descubierto. Es el caso de Philorizus tinauti, un carábido endémico del sureste andaluz, Origmatogona tinauti, un milpiés endémico de la Cueva del Agua,  Polydrusus tinauti  un coleóptero de la familia de los gorgojos y Aphaenogaster tinauti, una hormiga carnívora.




Un júbilo muy productivo. A punto de cumplir 68 años continúa como colaborador extraordinario en la Universidad desarrollando una ardua labor investigadora y de divulgación científica. Lo ‘pillo’ terminando varios artículos sobre hormigas cuyo estudio pretende seguir adelante hasta completar la fauna del grupo en  Andalucía y su filogenia En el departamento sigue dirigiendo algunos Trabajos Fin de Grado y de Fin de Máster  y en la mejora de la Colección Histórico-Didáctica y Científica de Zoología. Además colabora con otros grupos de investigación sobre la mariposa Apolo o la fauna de la Cueva de Nerja. Además asesora y desarrolla varios estudios en el Parque de las Ciencias en el aula científica del BioDomo.

lunes, 18 de junio de 2018

Yo soy español, español, español

Nueva columna Sacando Punta en El Independiente de Granada.

www.elindependientedegranada.es/blog/yo-soy-espanol-espanol-espanol


Hay quien llama la atención sobre el posible ‘efecto llamada’ de la llegada del Aquarius. Yo espero que al contrario pueda ser una llamada de atención a la Unión Europea y al mundo.
Faltó muy poco la noche del viernes para que millones de gargantas lanzaran el grito de guerra del orgullo patrio “yo soy español, español, español...”, (en la versión local se completa con: y de Graná casi ná). Faltó un gol más de la roja o uno menos de CR7; o sobró el penalti tempranero o el fallo de De Gea o faltó que entrara el disparo al larguero de Izco o la espuela de Koke. Cualquiera de esos lances hubiera conducido a la victoria y desatado los gritos de euforia, en el arranque del Mundial de Rusia. Apenas 48 horas después del relevo del seleccionador que presagiaba el fracaso de la ‘roja’ en quinielas, porras y en las apuestas, estuvimos a punto de lanzar las campanas al vuelo y de salir con las pinturas de guerra lanzando cohetes.
A mí también me gusta la fiesta futbolera pero el grito del titular lo lancé durante la mañana dominical, cuando el Aquarius entraba por la bocana del puerto de Valencia. No pude contener el grito en twitter ni en facebook y me puse a escribir estas líneas para manifestar que me siento orgulloso de que el gobierno de mi país tomara la decisión humanitaria de acoger a los ‘pasajeros’ del barco abandonados por el gobierno italiano (que no por Italia donde esa decisión ha molestado a tantos ciudadanos incluidos algunos viejos amigos ecopacifistas que esta semana enviaban mensajes felicitándome por la decisión del gobierno de Pedro Sánchez y avergonzados por la xenofobia del presidente Giuseppe Conte y Salvini -el apellido del vicepresidente no haca causa con su actitud en este asunto-).
Y siento orgullo también por la respuesta del gobierno de la Comunidad Valenciana y de muchos ayuntamientos y organizaciones no gubernamentales que se han aprestado a colaborar en la recepción de los migrantes. Y siento especial orgullo por los numerosos voluntarios que están participando en la atención durante la acogida en suelo español.
Orgullo de ser español que he sentido también esta misma semana cuando el Consejo de Ministros anunciaba que iniciaba el camino a la sanidad universal, los trámites para revertir en unas semanas aquél aciago Decreto de 2012 que quitaba el derecho a la asistencia sanitaria a “los inmigrantes no regularizados”. Esa medida devuelve la decencia política a nuestro país y recoge el mandato de organismos internacionales y del Defensor del Pueblo. Pero además de ser una medida indigna e insolidaria se ha demostrado que tenía un planteamiento falso y se ha mostrado ineficaz económicamente y con nefastos resultados según lo expertos en salud pública.
También hay algunos españoles que han llamado la atención sobre estas decisiones advirtiendo de su posible ‘efecto llamada’ en los países subdesarrollados. Eso piensan y dicen para alimentar a su seguidores con ese podrido argumento o eso dicen para los que así pudieran pensar se identifiquen con esas fuerzas políticas. No sé que es peor. Me dan pena y repugnan esos ‘buitres’. Son los mismos carroñeros que de producirse la derrota de la selección se lanzarían a atacar a Rubiales, a Diego Costa o a De Gea, por distintas razones pero con el mismo objetivo. Patriotas de hojalata todos que diría aquél. Yo espero por el contrario que la medida tenga un efecto de llamada de atención a la Unión Europea y al mundo y sirva de revulsivo para replantear de manera unida y solidaria la situación de los inmigrantes y la situación de los países de donde vienen los inmigrantes.
Esta semana yo seguiré cantando ‘yo soy español’ por las dos razones y me uniré al grito de ‘a por ellos’ pero no contra los catalanes, sino a abrazar a los que han llegado en los barcos a nuestra tierra, porque eso nos ha hecho grandes a los españoles como país y a ellos les hace dejar de ser pequeños y les devuelve a la Humanidad. Y gritaré ‘a por ellos’ también  estos días frente a Irán y a Marruecos, pero sólo en sentido deportivo.
Nota: No me pidáis que cante el himno español con la letra de Marta Sánchez, que yo soy un ciudadano español orgulloso, pero no tengo el orgullo de ser español de Ciudadanos, a tanto españolismo no llego.

lunes, 11 de junio de 2018

Pepe BADAJE, cronista 2.0 de Lanjarón y su Sierra

Esta  semana he dedicado mi entrevista/reportaje en Granada Hoy a José Puerta, conocido como Pepe Badaje en Lanjarón y en las redes sociales donde realiza una gran tarea divulgativa de 'su' pueblo y de 'su Sierra'.

Enlace a la edición digital, AQUÍ.
http://www.granadahoy.com/provincia/Pepe-badajeCronista-Lanjaron-Sierra_0_1252975261.html

y así quedó la doble página en la versión impresa:




Transcribo aquí la versión original:

SIERRA NEVADA, PAISAJE Y PAISANAJE

Pepe ‘Badaje

Cronista 2.0 de Lanjarón y su Sierra



José Puerta Álvarez, nació en 1974 en Granada, aunque ha vivido toda su vida en Lanjarón, ciudad balneario y “Puerta de la Alpujarra”. Estudió segundo grado de Formación Profesional en la rama de electricidad y electrónica en el Instituto de Órgiva. Ha trabajado como autónomo y en diferentes empresas de la provincia de Granada. En la actualidad, trabaja en la planta de envasado de Aguas de Lanjarón. Su afición a pasear por la Sierra de Lanjarón le viene desde muy pequeño, cuando inició sus escapadas que proporcionaron más de un susto a sus padres, cuando se le echaba la noche encima. Se considera un privilegiado por vivir en su pueblo que le permite “apenas te sales del casco urbano” estar en plena naturaleza. Valora especialmente un entorno natural en el que se puede pasar de un clima, en la parte baja del pueblo, donde se cultivan frutos subtropicales, al desierto frío de la alta montaña con climas extremos. 

De la Sierra a las redes. Pepe 'Badaje' es el nombre de guerra que utiliza José Puerta en las redes sociales en donde editó una página web con esta denominación. Ahora divulga el pueblo y la Sierra de Lanjarón a través de su blog (paseandolanjaron.blogspot.com), en flickr, en su cuenta de twitter, en facebook, en pinterest…Un cronista 2.0. del municipio de Lanjarón y de su Sierra.

¿De dónde te viene el ápodo de Pepe Badaje? Es un mote familiar que viene del tío de mi abuelo. Aquí en el pueblo, todo el mundo conocía a mi abuelo (Rafael Badaje) y conoce a mi padre (Rafalín) por ese nombre. La familia de los Badajes es muy pequeña. Así que, sí o sí, yo sería conocido por Pepe Badaje.
¿Qué es lo que más te atrae de la montaña? Es en "La Sierra" como aquí decimos, donde siempre centré más mi atención y curiosidad por explorar lugares a la vez que investigar el por qué hay, en un punto determinado, un refugio de montaña, un cortijo en ruinas, una era abandonada, o el rastro de un sendero ya en desuso, y saber de sus historias. Y descubrir parajes en donde familias enteras vivían en y de la montaña en épocas de escasez después de la Guerra Civil o los lugares por donde los maquis se escondían de la Guardia Civil. Algunos, (“Los Luques”) eran hermanos de mi abuela paterna.
Aparte de la Sierra de Lanjarón, ¿qué otras partes de Sierra Nevada conoces? Casi toda. Los valles del Poqueira y del Trevélez, conozco la parte de la Vereda de la Estrella, los Lavaderos de la Reina en esta época tan de moda por el deshielo; la Loma de los Papeles con sus espectaculares vistas de las ‘nortes’ y como no podría ser de otra manera toda la cuerda de los tresmiles, desde el Caballo hasta el Picón de Jérez. Es a partir de allí donde no he seguido. Quizá sea el momento de seguir descubriendo más Sierra…
¿Y cuáles son tus zonas favoritas? Mi parte favorita, aparte del Valle de Lanjarón, es todo el Valle del Río Chico: Puente Palo, Robledal de Cáñar, Las Alegas, El Cebollar, Tajo de los Machos, Cerrillo Redondo... Estos dos últimos en la divisoria con el Valle de Lanjarón. Una zona poco masificada y muy cerca de donde vivo.

¿Quién ‘anda’ ahora por la Sierra? Paseando por la Sierra te encuentras todo tipo de personas, desde guardas de medio ambiente, pastores con su ganado, senderistas, alpinistas, ciclistas, corredores, cazadores, ornitólogos, turistas, domingueros... Hoy en los espacios naturales hay unos usuarios muy variados. Es difícil encontrar algún rincón solitario en la Sierra. Yo los busco y todavía los encuentro. Me gusta mucho la soledad y tranquilidad en la montaña y huyo de las zonas más masificadas de la Sierra. De vez en cuando salgo con amigos, pero como ya he comentado, lo que busco es paz, soledad y disfrutar del paisaje y ver la fauna. Desconexión total: vuelves nuevo...
¿Han cambiado los usuarios? Desde luego que sí. En los últimos tiempos ha aumentado considerablemente el número de ciclistas de montaña. Hace 15 o 20 años era raro ver a un ciclista por una pista forestal. Hoy en día puedes encontrarte con bastantes. A veces la convivencia es difícil entre ciclistas, moteros y conductores de vehículos. Lo comento por la última vez que subí en fin de semana a Pradollano por la carretera, nunca más. De locos...
¿Hay un comportamiento responsable? No se puede generalizar. Hay una gran mayoría, los que más, que hacen un uso responsable, pero hay una minoría, que son los que más ruido hacen, por decirlo de alguna manera, que vamos… Todos estamos hartos de encontrarnos los refugios de montaña llenos de basura dejada allí por personas cuyo comportamiento deja mucho que desear; es lamentable levantar una piedra cerca de alguna laguna y encontrarte latas o botellas.
Luego hay otros comportamientos también negativos para el medio ambiente. Por ejemplo hay quien les da de comer a las cabras monteses o a los zorros y enciman suben imágenes a las redes sociales tan contentos. Lo que no saben es el flaco favor que están haciéndole a estas especies silvestres... Otro ejemplo está en los que vivaquean encima de los borreguiles, con un gran impacto sobre la flora exclusiva de Sierra Nevada. Todo es cuestión de educación y de valores y en este campo, desgraciadamente, queda aún mucho trabajo por hacer.

¿Los lugareños conocen su Sierra? ¿La aman? La conocen sí, unos en mayor medida otros menos, pero todos la adoran. Por lo menos es la percepción que tengo al publicar fotos de la Sierra. Hay personas que por su condición física o porque están fuera de aquí por trabajo, son los que más la añoran. También hay personas que no la conocen y le gustarían tener la oportunidad pero no se atreven por esa misma razón. Son muchas las personas que me piden personalmente salir un día de caminata y enseñarle alguno de los increíbles rincones de nuestra Sierra.
¿Se sienten orgullosos de vivir en un espacio protegido? Hay de todo. Hay muchas reticencias por parte de algunos lugareños por los contras y las limitaciones que tiene el vivir en un entorno protegido, sobre todo, del que tiene campo o vive de él, a la hora de construir edificaciones (naves de aperos, cortijos…). Buscar el equilibrio entre ambas partes (Parque e implicados) es lo ideal. También está claro que debemos proteger y cuidar y -si es posible- mejorar esta joya que hemos heredado de nuestros ancestros, que muy bien han sabido mantener en perfectas condiciones, para las futuras generaciones.
Tú, si sientes mucho orgullo, ¿no? Yo presumo constantemente y por ello me gusta compartir lo que la disfruto en mis salidas. Algunas veces pienso: ¿qué sería de la provincia de Granada sin Sierra Nevada, sin su "pantano" de nieve? ¿Sin el agua -agua de vida- pura del deshielo que fluye por ríos y acequias como si de sangre por las venas se tratara? Aquí no habría nada y habría que irse a otra parte. El agua lo es todo para las personas que vivimos aquí y sí, para los ‘cañoneros’ es todo un orgullo vivir aquí. Estamos muy orgullosos de ser cañoneros y, en Lanjarón, bien sabemos que debemos mimar nuestro entorno. Una buena parte del pueblo vive del turismo del balneario, de la actividad de la empresa embotelladora o de la agricultura, también muy ligada al agua. Por eso, como un cañonero más, me siento orgulloso al igual que todos mis vecinos, de vivir aquí y de que es conveniente preservar ese bien, que nos brinda la madre Tierra, que nos da la vida, lo más intacto y puro posible.

¿Cómo recuerdas el incendio de Lanjarón del año 2005? Fue un mal día para todo el pueblo. Hace casi trece años y lo recuerdo como si fuera ayer mismo. Aún recuerdo el gran despliegue de medios aéreos que fue brutal. Se juntaron un cúmulo de circunstancias y de mala suerte. La negligencia de unos excursionistas que se perdieron, llamaron al 112 y encendieron una fogata para ser vistos por el dispositivo de búsqueda, el fuerte viento que hacía aquel atardecer, lo reseco que estaba el campo (era septiembre), la gran cantidad de combustible, lo escarpado del terreno y el anochecer que ya no permitía a los helicópteros actuar.
¿Cómo está la zona en la actualidad? Se observan signos evidentes de recuperación. Se aprecia en Tello mucha regeneración natural. También en otras zonas como por la Bordaila o por el Cortijo "Quemao" o por la zona de Torna Cano, donde participaron muchos voluntarios en su restauración. Creo que las administraciones deberían tener más ambición y ser más persistentes en sus políticas de repoblación y a la vez hay que hacer más tareas de prevención como desbroces… pero claro todo esto cuesta mucho dinero y durante este tiempo la cosa no andaba muy boyante, hay otras prioridades y también es comprensible.
¿Qué opinas de los proyectos de crear una estación de esquí en El Caballo? He leído algo por internet. Cargados de buenas intenciones supongo, dicen que no van a producir impactos en el entorno… Pero creo sinceramente que con el dominio de la actual estación es más que suficiente. Cabe la posibilidad de practicar el esquí de travesía que no genera apenas impacto.

RECOMENDACIONES:

Un lugar a descubrir.
La zona de la Haza del Enano, a 2200 metros, cerca de la toma de la Acequia Alta en el Río Lanjarón. Hay un antiguo sendero abandonado que parte desde Prado Abarca o del Llano del Espino que podría ser puesto en valor.
Un paraje a recuperar. Tello. Creo que se puede hacer todavía más.
Un sendero. "Verea Cortá"
Una época del año. Me gusta tanto el otoño como la primavera. Si hay que elegir una, me quedo con el otoño. En esa época normalmente tengo más tiempo libre para disfrutar de la Sierra, sus atardeceres, la luz y color de esta época, ideal para la fotografía.
¿Atardecer o amanecer en la Sierra? Atardecer.
¿Cuál es la especie animal que más disfrutas viendo? La reina de las cumbres: la cabra montés. Me paso las horas observándolas.
¿Y la planta que más te impresiona ver florecer? Las gencianas que nacen en los borreguiles. Me encantan.