lunes, 30 de marzo de 2009

Escapada a China

He estado unos días, por primera vez, en China. Una breve escapada a las dos grandes ciudades chinas, Beijing y Shanghai, y sus alrededores, pero suficiente para tomarle el pulso al gigante chino, para echarle un vistazo al momento que vive este milenario país, y para hacerme un idea de cómo es la vida, la gastronomía, la arquitectura o la gente de este lugar.

Lo primero que me ha llamado la atención es el funcionamiento del modelo de economía capitalista en un país comunista (o al menos en un sistema totalitario, no democrático). En el mundo urbano chino no hay, en apariencia, grandes diferencias con las ciudades del mundo occidental. Calles llenas, (muy llenas), de coches, bloques enormes de pisos, circunvalaciones primeras, segundas, terceras… Bullicio, muchas luces, comercios, restaurantes, ruido.

Señalaré algunas diferencias sutiles como que los colores de los semáforos son sólo a titulo indicativo o que los pasos de peatones están ahí, sí, pero no se respetan por los coches ni por las personas. Bicicletas quedan pocas pero sólo para los muy, muy pobres o bien para una incipiente y escasísima élite concienciada ecológicamente o por esnobismo.

Por las calles y monumentos que hemos transitado hemos visto muchos chinos y chinas, yo he contado millones, lo que me hace dudar de las cifras oficiales, pero a diferencia de lo que me impresionó en EEUU que había gordos y gordas por todas partes, no he visto ni una sola persona obesa entre los autóctonos lo que puede deberse a la alimentación y al ejercicio y juegos que hacen. Es habitual ver en parques a personas haciendo tai chi o jugando con cintas, con diábolos, trompos u otros artilugios.

Entre los jóvenes estos hábitos se están perdiendo y cada vez más tienen costumbres y alimentos más “occidentales” por lo que aventuro que en pocos años estas diferencias irán desapareciendo desgraciadamente.

He contado en unas cuantas entradas cómo me ha ido el viaje, a manera de agenda de cada día; lo he ilustrado con fotografías para ambientar los comentarios y las he dejado colgadas en su respectiva fecha, en mi blog para mi recuerdo, para quien quiera saber un poco más de China (de la China que yo he visto) y para quien pueda serle útil mi experiencia.

domingo, 29 de marzo de 2009

ZAI JIEN

Es nuestro último día en Shanghai, en China, y hoy no tenemos a Juan ni a su alocado conductor. He visto en un mapa los lugares que queremos visitar y lo más conveniente es empezar por el Templo de Buda de Jade. Es el lugar más lejano del hotel y desde allí iremos regresando a lo largo del día.

Al llegar al Templo de Buda de Jade (pintado de amarillo como es preceptivo) vemos que hay movida. Recordamos que estamos en la víspera del Día de los Difuntos para los budistas y hay mucha gente haciendo las ofrendas. Queman unos papeles plateados y dorados que son mensajes para los que están en otros planos. El ritual se completa con la quema de incienso y una serie de genuflexiones ante alguno de los múltiples Budas que hay en los Pabellones exteriores. Destacan tres de madera dorada con sus guardianes. Todo el templo está profusamente decorado con el rojo y amarillo predominando y múltiples adornos, esculturas, campanillas, lazos de seda, etc.

Los famosos budas de jade están aparte y para verlos hay que pagar un extra que ya que estamos abonamos. Dicen que los trajeron de Birmania en 1882hace doscientos años y el templo se construyó para albergarlos. Se salvaron de los Guardias Rojos porque los monjes pusieron la fotografía de Mao en la puerta. Merece la pena verlos aunque no me queda claro si son de jade blanco o de un mármol pálido. Una representa a Buda entrando en el nirvana y otra el clásico sentado. Pero lo que más llama la atención es la visión comercial de los monjes que han creado un gran supermercado en torno al chiringuito con lo que se produce un fenómeno de convergencia adaptativa con los lugares de culto cristianos. Hay una diferencia: en el templo hay un restaurante vegetariano abierto todo el tiempo y las monjas sólo han sabido comercializar dulces de temporada (Semana Santa y Navidad).

Abandonamos el templo y nos vamos a la ciudad antigua. Regresamos a este lugar de casas de madera tradicionales y que es un hervidero de gente, de comercios, puestos callejeros, incluidos los de comida que no nos atrevemos a probar, y agentes comerciales callejeros que venden por catálogo y cuya palabra clave es: ¿guachis?. Pueden parecer molestos pero abandonan el asalto a las palabras mágicas de bu yao (no quiero).

Pasamos de nuevo por la puerta de Yuyuan que ahora podemos ver en un hermoso día soleado y recorremos tranquilamente las calles y algunas tiendas. Sólo algunas compras complementarias menores.

Comemos en un McDonald, para descansar de la comida china aunque el olor y el sabor del local sigue siendo achinado, que está junto a la Puerta del Dragón en la entrada de la ciudad antigua y desde aquí cogemos un taxi, con un poco de dificultad porque aquí no se respetan los turnos en las paradas, y nos dirigimos a Nanjing Lu. Aquí están el resto de chinos que no habíamos visto hasta entonces. Impresionan sobre todo los palacios reconvertidos en centros comerciales con inmensos rótulos de colores. Aquí es donde se aprecia de manera más clara el eclecticismo de Shanghai, la ciudad más abierta e internacional de China, antes y ahora. Terminamos este paseo en la Plaza del Pueblo junto al nuevo ayuntamiento.

Desde aquí tomamos otro taxi en dirección a nuestro barrio con parada previa en el Museo de la Ciencia y la Técnica. El edificio es impresionante pero está cerrado y buena parte de su interior no está equipado. En los carteles veo que hay una exposición temporal sobre los Tesoros del Nilo o algo así y otra de dinosaurios. Bajamos hasta los sótanos del edificio porque Jorge, el mejicano, nos contó que había un mercado en el que podríamos encontrar cosas interesantes. Resulta ser una réplica de los almacenes que hemos conocido en Pekín. Ya sabemos los precios y la técnica y aunque hay poca gente y es menos estresante, ya vamos al límite del peso máximo permitido en el avión.

Regresamos al hotel y decidimos que hoy cenaremos en casa y podremos reorganizar el equipaje y prepararnos para la larga vuelta del día siguiente.
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Aeropuerto shangalés internacional de Pudong, Aeropuerto parisino Charles de Gaulle, (escala de tres horas), aeropuerto de Málaga (nos recogerán Nhaiara y Diego para ir más cómodos en la vuelta) y a casa. Un largo día de viaje de vuelta pero ha merecido, con mucho, la pena.

sábado, 28 de marzo de 2009

El segundo día en Shanghai también amanece muy nublado aunque apenas si caerán algunas gotas a los largo del día.

El programa del día tiene dos partes distintas la visita a Zhu Jia Jiao y a la Plaza Jin Mao.

Salimos de la ciudad en dirección oeste y nos dirigimos al distrito shangalés de Zhu Jia Jiao, una pequeña villa antiguamente de pescadores y campesinos que hoy está transformada de cara al turismo con múltiples comercios artesanos y casas museo, que dan una idea de cómo ha sido la vida en el país en tiempos no muy lejanos. El recorrido incluye un pequeño paseo en una barca por los canales. Es el lugar adecuado para caer en la tentación de comprar souvenirs y caemos repetidas veces. Por supuesto aquí también hay regateo pero es muy diferente al de las tiendas de Pekín o a los mercados de Shanghai, que también los hay.

Terminada la visita a esta aldea del siglo pasado volvemos al corazón de Shanghai al siglo XXI a la parte más moderna del nuevo Shanghai. Volvemos a cruzar el gran río Huangpo, ahora por uno de los tres enormes puentes que unen Pudong y Puxi, las en dos partes de la ciudad. Comemos en un restaurante junto a la Perla de Asia el famoso pirulí de tres bolas. Coincidimos con la celebración de una boda local en el Salón y deseamos suerte a los novios.

Tras la comida nos dirigimos a ver la ciudad desde todo lo alto del próximo edificio Jin Mao situado junto al tercero más alto del mundo en la actualidad. Pronto Shanghai contará con el más alto porque ya se construye la Torre Shanghai que ya está pintada en los carteles de la ciudad y simulada en las guías, cartelería y postales.

El vuelo hacia el piso 88 es rápido. En menos de un minuto llegamos a la zona superior del edificio que en más de la mitad de sus plantas es un hotel de lujo. Desde arriba podemos darnos cuenta de las verdaderas dimensiones de este monstruo en el que viven 15 millones de personas de los que se calcula que casi dos millones son población flotante de toda China y de todos los rincones del mundo.

Al bajar pasamos por la puerta del Acuario que tiene fama de ser uno de los más grandes y mejores del mundo (tiene 5 pisos y un túnel de 155 metros). Desde aquí cruzamos el río Huangpo de nuevo y nos dirigimos justo en frente de donde hemos visto la ciudad desde arriba. Vamos a pasear por el Malecón y por el Bund. En el paseo del Malecón es difícil hacer una foto sin que salgan 3.000 chinos y por el Bund, es sábado, y hay que ir esquivando gente por las calles comerciales de este “barrio chino” que no parece ni un “barrio chino” ni parece chino.

Juan nos dice que tiene que cumplir con la agencia de viajes y llevarnos a un centro oficial de venta de perlas pero que no hay compromiso. Hacemos una visita rápida, vemos perlas de todos los colores, conocemos un poco del proceso industrial de producción de estas perlas de acuicultura dulce y nos vamos, sin comprar.

Volvemos pronto al hotel y aprovechamos para ir a darnos un masaje. Juan ha hecho gestiones por teléfono y hay salas de masaje con precios a la mitad que en el hotel. Nos reserva en uno en el mismo distrito de Pudong, cercano relativamente al hotel. Una hora 110 yuanes, masaje por todo el cuerpo. Quedamos como nuevos, regresamos al hotel y tras un baño nos vamos a pasear, cena ligera y una copa por la zona europea. En el pub actúa un grupo filipino (los latinos de Asia) que debe ser muy famoso y nos encontramos con Jorge un joven empresario mejicano que lleva varios años en China aunque sólo un par de semanas en Shanghai donde se ha trasladado con su novia china. Nos pone al día del momento que vive esta parte de China y nos da algunas sugerencias para nuestro último día que tiene programa libre. Nos facilita su móvil por si hay algún problema y su correo electrónico ya que me ha visto la blackberry y puede ser útil en situaciones urgentes.

viernes, 27 de marzo de 2009

WO HUI YI DIAN

Yolanda, nuestra guía, ha venido a acompañarnos al aeropuerto y a despedirse. Está especialmente contenta porque tras embarcarnos, ella embarcará a encontrarse con su arquitecto. Tras un problema con la confusión de dos Ignacios Henares viajando juntos (el problema de no reflejar los dos apellidos en los billetes), sacamos las tarjetas de embarque, nos despedimos de nuestra guía y agradecemos su colaboración en que nuestra primera parte del viaje haya sido estupenda.

El vuelo a Shanghai dura apenas un par de horas que a alguien se les pasa volando. Llegamos al aeropuerto Hong Qiao, el más antiguo de la ciudad, donde nos espera “Juan” que será nuestro guía-intérprete en esta segunda etapa del viaje.

Si a Pekín llegamos un año después de las Olimpiadas a Shanghai llegamos un año antes de la Exposición Internacional del 2010 que ya se vive por toda la ciudad.

Como nuestro hotel está en la zona más moderna de la ciudad, justo al lado opuesto de donde nos encontramos, propone que aprovechemos el día, (atravesar la ciudad en dos ocasiones nos puede hacer perder mucho tiempo), y vayamos a comer antes y después nos quedemos viendo el Templo de los Dioses Protectores (ni hay templo ya ni hay dioses protectores ni ná) en la parte más antigua de la ciudad y el Parque Yu Yuan. Aceptamos convencidos que es la mejor opción mientras nos asegura que no pasará nada con el equipaje. Nuestro conductor, curioso personaje, lo cuidará con celo.

Antes de la comida pasamos por un banco a cambiar otro poco de dinero (un modernísimo lugar con tecnología punto y unos bancos de espera con tapetes de ganchillo, un símbolo de las contradicciones y de las paradojas chinas) y desde allí, andando, nos dirigimos a un restaurante situado en un centro comercial donde nos ponen un montón de bandejas, esta vez sin mesa giratoria por lo que la comida es un continuo paso de platos en todos los sentidos. Es cierto Se asombran cuando pedimos repetir las pijiú pintá y les decimos que si hace falta las pagamos y efectivamente ha hecho falta pagarlas. El día está nublado y a veces cae una fina lluvia que debe ser ácida pues la contaminación en Shanghai es importante.

Tras la comida nos vamos directos al Museo de Arte, donde apenas estamos una hora que aprovechamos para ver las salas dedicadas al bronce y a la cerámica. En la tienda del Museo compramos un paragüas pues la lluvia, aunque suave, no cesa. El conductor nos espera puntual a la puerta del Museo situado en la parte moderna, en la confluencia de las antiguas concesiones francesa e inglesa. Desde allí nos conduce a la parte más antigua de la ciudad convertida en centro comercial y turístico pleno de bullicio. A todas horas parece la feria del Corpus en hora punta. Vamos directamente al Parque Yu Yuan al que ni siquiera la tarde gris (nos da una tregua el chirimiri) le resta belleza. “Paco” no sólo nos acompaña sino que continuamente nos va contando cosas de la historia de Shanghai y especialmente nos explica el diseño del “jardín chino clásico” una combinación equilibrada de la piedra, el agua, las plantas y la arquitectura. Y la casa de Yu es uno de los mejores ejemplos de todo el país. Miles de detalles en las esculturas, en los tejados, en las piedras de adorno traídas algunas desde lugares remotos, en las plantas, (algunas de ellas con centenares de años como un bellísimo ejemplar de Ginkgo biloba o cuidadísimos bonsais) y en todas las puertas y ventanas. Sólo están visitables algunas de las casas-pabellones del conjunto que muestran que el interior estaba en armonía con los exteriores.

Como a Juan le habíamos mostrado interés por comprar “falsificaciones auténticas” ha hecho un par de llamadas y ha concertado una visita a un piso franco cercano donde encontramos buenos bolsos de Chanel, Gucci, Luis Putón y otras. La negociación es dura pero al final hacemos una compra total del grupo a buenos precios. La tarde se nos ha echado encima y Paco nos acompaña al hotel Holyday Inn Shanghai Pudong Nanpu. Cruzamos el río por primera vez, esta vez por abajo, por un túnel de dos pisos, y nos dirigimos a la zona de Pudong, la zona más nueva de la ciudad; en apenas 20 años, ha crecido enormemente y aquí se encuentra la zona residencial y hotelera más importante en la actualidad.

El hotel es moderno, sin llegar al lujo del de Pekín, es un cuatro estrellas verdaderamente bueno. El check-in es rápido. Descansamos un poco y tiramos de listado de restaurantes recomendados y optamos por marisco. Un taxi nos deja a las puertas de un Seafood (parece que hemos acertado) y tenemos una cena magnífica gracias a la traducción de unos argentinos que llevan tiempo en Shanghai y que ya han comido varias veces en este lugar. Orejas de mar, langostitas y otras tonterías que compartimos. Acabamos temprano pero el día ha sido largo y nos vamos a la cama.

jueves, 26 de marzo de 2009

YAO, BU YAO?

Nuestro último día en la capital tiene como principal centro de atención la visita al Palacio de Verano. (Este nombre también corresponde a las ruinas de una residencia veraniega imperial cuyo diseño fue encargado a los jesuitas para rivalizar con Versalles que fue arrasado en 1860 por las tropas de los países occidentales). Hemos quedado un poco más tarde porque está cerca al noroeste de la ciudad. Además nos retrasamos un poco porque se nos ocurre cambiar dinero en un banco oficial y nos toca sufrir la burocracia y el exceso de celo de un funcionario chino. Me lo pierdo porque me quedo fuera viendo la vida cotidiana en la calle: tengo deformación desde que fui concejal y me detengo a observar el transporte público, alumbrado, los alcorques, el acerado, los cauchiles y otras cosas insignificantes.

El Palacio de Verano tiene una historia dilatada que arranca a mediados del siglo XII con el primer emperador de la dinastía Jin. A lo largo de los siglos ha sufrido diversas transformaciones y ampliaciones; la más significativa se refiere a la ampliación del lago, ahora llamado Kumming, que ocupa las tres cuartas partes del complejo en la actualidad. La zona residencial se ubica en la denominada Colina de la Longevidad Milenaria. La parte religiosa está dominada por el Templo de la Gratitud y la Longevidad y el Jardín es conocido como el Parque de las Ondas Cristalinas. Estos lugares también sufrieron ataques y saqueos y la estructura actual de pabellones, jardines, templos, galerías cubiertas y lago es adjudicada a la emperatriz Ci Xi de la que Yolanda nos cuenta una historia que a mí me suena demasiado a leyenda trufada de misoginia y machismo y simplificación de las causas de la caída del ultimo emperador.

El paseo por todo el recinto es muy agradable con música ambiental en muchos lugares aunque se nota que le falta mucho por restaurar y “poner en valor”. A mí me encantan especialmente las pinturas naturalistas por todas la galerías y pabellones y las múltiples formas de los ventanales y sobre todo, el Barco de Piedra, embarcadero donde la emperatriz tomaba el té con los invitados.

Aunque estamos a principios de primavera y algunos magnolios ya están en flor, más adelante los jardines deben estar en todo su esplendor con las glicinias o las flores de loto por todas partes combinando colores.

Terminamos la visita con un paseo en barco cruzando hasta la Isla del Rey Dragón que está unida a la otra orilla por un puente de 17 ojos que imita al conocido como de Marco Polo (si sumamos el del centro por las dos partes tenemos de nuevo el número 9 mágico).

Como siempre tenemos que avisar que vamos tarde a la comida (¡¡¡a las 13,30 h.!!!) pero por suerte esta vez está concertada en un pequeño restaurante contiguo que me hace comentar a mi compañero de viaje y empresario hostelero ¿qué buen lugar para montar un negocio, n’est-ce pas?

En el viaje de vuelta le pido a Yolanda que pasemos por la ciudad olímpica para poder ver de cerca los grandes escenarios que habíamos visto por televisión ("El nido", la burbuja de agua", la villa olímpica). Consigo que pare en un lugar desde el que poder hacerme fotos que puedan atestiguar "yo estuve allí, en las Olimpiadas de Beijing", aunque un año después y me cuenta cómo se organizó todo en la ciudad para que no se produjera un colapso.



Tras la comida nos volvemos a separar el grupo según preferencias y necesidades. Nosotros vamos, un día más, a aprender chino comercial. Como ya sabemos la mecánica y tenemos claro lo que vamos a comprar acabamos pronto lo que nos permite maquearnos un poco y aventurarnos a comer en el DaDong Roast Duck, el lugar donde se presume de cocinar el mejor pato laqueado de Pekín.

Llegamos a una hora prudente pero hay cola y todos tienen reserva. Sin sobornar a nadie me las apaño para conseguir que nos reserven una mesa, estilo James Bond, y mientras esperamos tomamos un buen vino blanco y un canapé muy bonito de color, muy bueno de sabor, con una estupenda presentación que no quisimos estropear preguntando qué era.

El restaurante es merecedor de la fama y mientras llega el pato, que está verdaderamente delicioso, tomamos unas entradas en las que se incluyen atrevidamente los pepinos de mar, (a la vuelta recuperaré mis contactos con la Cofradía de Pescadores pues he visto como se desechan en la Lonja de Motril y podemos ponerlos de moda en el Tendido Cero), que resultan ser una delicatessen así preparados y servidos. El pato se corta y se sirve con un ritual frente a la mesa y se come en unas tortas con una salsa suave y una guarnición. La camarera nos enseña a liarlos con los palillos con una gran habilidad pero es más práctico con los cubiertos o directamente con los dedos.

Tomamos un taxi de regreso al hotel. Hay que preparar las maletas, reordenando el equipaje y madrugar para ir al aeropuerto. Destino: Shanghai, segunda etapa del viaje.

miércoles, 25 de marzo de 2009

WO HEN HAO XIEXIE

Hoy hemos madrugado un poco porque nos vamos hacia el Norte, a las afueras de la capital. Visitaremos la Gran Muralla (es una tontería referirse aquí a ella como la muralla china) y las tumbas de la dinastía Ming.

Los Chinos conocen la Gran Muralla como la Muralla de los Diez Mil Li (una medida de longitud de aproximadamente medio kilómetro). Nosotros hemos conocido el tramo más cercano a Pekín (aproximadamente 60 kilómetros de la capital), el de Badaling, el más famoso y visitado y también el que se encuentra en mejor estado de conservación.

Hemos recorrido sólo un pequeño tramo para poder tener una perspectiva amplia de esta obra que la propagada señala como la única obra humana que se puede ver desde el espacio y la suficiente distancia como para llegar a un puesto “oficial” de acreditación donde encargamos una placa y medalla con nuestros nombres. (Luego advertiré que también se pueden conseguir abajo en la zona de recepción donde están los aparcamientos restaurantes y chiringuitos de abalorios varios). El paseo no sirve para tomar el sol, hacer un poco de ejercicio (que se convertirá en agujetas para alguno del grupo) y para cruzarnos con gente de todos los continentes, de todas las razas, de todos los idiomas.

Mi chaquetón de la Consejería de Medio Ambiente y mi gorra del sendero Sulayr de Sierra Nevada sirvieron para hacer publicidad, on line, a través de Facebook con una foto que titulé “Sulayr, el sendero más largo del mundo”.

Junto a la carretera que nos ha llevado a Badaling, hemos visto un AsiaDisney a medio hacer y Yolanda nos ha revelado que es un proyecto que lleva “congelado” cinco años así que no es víctima de la crisis global y las causas son secreto del régimen aunque se descarta la falta de mano de obran y tampoco se deberá a los altos salarios de la construcción o del sector servicios.

A la vuelta de la visita a una de las maravillas del mundo que me faltaban (me quedan ya tres de las siete por conocer), hemos parado a comer en un complejo turístico, que además de un gran restaurante en el que repetimos buffet variado de comida china (prohibidas las ensaladas y comidas crudas), tenía unos talleres de artesanía y una gran tienda en la que hemos podido ver cómo se hacen esos jarrones que se comparan con los expresidentes de gobierno en España.

Tras la comida la segunda parte cultural del día: visita a las tumbas de la dinastía Ming, un complejo funerario con 13 mausoleos que arrancan en la Gran Puerta Roja y se comunican por la Vía de los Espíritus, aunque sólo hemos visto una y es suficiente. Las tumbas están orientadas siguiendo el fengshui (viento y agua) con el fin de ponerse en armonía con las fuerzas naturales, ya que eran muy dados a eso de la geomántica. Hemos visto trajes y joyas imperiales, cerámica y esculturas de la época otras cosas interesantes pero pasará a nuestra memoria por ser el lugar donde nos retratamos vestidos de emperadores como si nos hubiéramos recasado.

El cambio de programa nos permite hoy tener la tarde libre que aprovechamos para… comprar. Hoy le toca al famoso Mercado de la Seda, cuyo nombre no tiene nada que ver con lo que se puede encontrar ya allí de la misma manera que en El Corte Inglés no hay nada, o casi nada, cortado en Inglaterra.

Terminamos muy tarde y ya no tenemos tiempo ni de cambiarnos ni de ir a ninguno de los restaurantes recomendados ya que a las 8,30 o a las 9,00 PM no permiten la entrada. Repetimos en el Relax, enfrente del hotel, y somos especialmente atendidos por el dueño. Comemos bien y somos perfectamente servidos por el personal que nos toma como algo extraño, han debido pasar por aquí poca gente como nosotros. Al final se quedará todo el personal sólo con nosotros como clientes, nos hacemos fotos e incluso nos recomiendan un lugar donde tomar una copa. Existe la noche en Pekín. Vamos a un barrio, chino claro, que es una zona llena de Pubs y recalamos en uno con actuaciones musicales, danza del vientre y acrobacias en directo. Sólo un par de cubatas mientras nos hacen una caricatura, les regalan flores a las mujeres y nos hacemos fotos con las cantantes del grupo.

martes, 24 de marzo de 2009

DUO SHAO QIANG

Ha habido un cambio consensuado de programa y hoy hemos visitado el Templo del Cielo y los callejones tradicionales de la ciudad antigua para así poder dedicar un rato de la tarde a las actividades comerciales.

El Templo del Cielo, Tian tan, es el templo por antonomasia de la etapa imperial. Era el lugar en el que el emperador, hijo del cielo, celebraba los ritos oficiales más importantes: en el solsticio de invierno el Rito de las Cuatro Periferias y en el equinoccio de primavera el Rito de la Buena Cosecha. Está situado en un gran parque (Tiantan Gongyuan) de más de 250 Has, donde los pekineses hacen deporte, juegan o bailan o las tres cosas a la vez. Visitamos el Palacio de la Abstinencia, el Altar Circular, La Bóveda Celeste Imperial (famosa por los fenómenos acústicos similares a los de nuestra Alhambra) y el Templo de la Plegaria por la Buena Cosecha, (con sus imponentes 28 columnas de madera), mientras Yolanda nos cuenta cómo se hacían los rituales (el último en el invierno de 1917) y nos imaginamos los cortejos desde la Ciudad Prohibida hasta aquí. Acabamos nuestro recorrido fotografiándonos, como manda la moderna tradición, en el lugar que la tradición antigua consideraba el centro del Universo.

Hoy hemos aprendido bastante sobre los números favoritos de los chinos el 9 y el 5 y sobre los malditos, el 4 y los que tienen 4.

Tras esta visita nos dirigimos a visitar los Hutong, callejones tradicionales de la antigua capital imperial. Están en proceso de reforma, muy transformados aunque da una idea, con un poco de imaginación, de cómo era la arquitectura y la vida pekinesa siglos atrás. Nos subimos a una bicicarro, con muchas reservas, para hacer un breve recorrido por este "casco hisórico", con parada en una casa típica donde nos reciben y nos cuentan una película una familia que ha recuperado la casa de sus antepasados.

Es hora de comer, como siempre en el último turno para aproximarnos al máximo al horario cristiano, y nos llevan a un restaurante para tomar un buffet de comida típica china. Como nos acompaña Yolanda podemos saber con certeza qué es cada cosa. Nos encontramos con las familias españolas que acaban de adoptar sus hijas (y un niño) chinas.

La guía nos deja en un centro comercial (Yashow) y echamos la primera tarde, moderada, de compras. Es la clase más larga de chino que tenemos. Sobre todo repaso de los números, y de los saludos y presentaciones. Es un lugar tranquilo con malas imitaciones y donde resulta un poco tedioso la negociación de los precios.

Esta noche acabamos cenando en la zona de Presidential Plaza, en la ruta del gourmet. Un poco tarde, nos damos cuenta que hemos elegido un lugar famoso por el picante. De nuevo somos los últimos en abandonar el local después de recibir dos avisos.

lunes, 23 de marzo de 2009

Ni hao

Se acabó la teoría. Empieza el curso práctico de chino. Afortunadamente tenemos guía en español, de los que acompañan habitualmente a las familias españolas que vienen a recoger sus hijas adoptivas a China. Se hace llamar Yolanda. Escuchó la canción de Pablo Milanés y escogió este nombre para su trabajo. Pronto sabremos que está recién casada, que en estos seis meses sólo ha visto un par de veces a su marido, un arquitecto que trabaja en una provincia del sur y que se siente, más de la mitad, española aunque no ha estado nunca en España.

Desde el aeropuerto que todavía “huele” y da la bienvenida a las Olimpiadas vamos directamente al Radegast Hotel. MariAngeles todavía no las tenía todas consigo hasta que hemos llegado y comprobado que las habitaciones correspondían con la publicidad de Internet. Estamos realmente en un 5 estrellas superior. Lujo asiático y todas las comodidades.

No perdemos mucho tiempo y salimos rápidamente a nuestra primera excursión. Nos dirigimos a la histórica Plaza de Tian`anmen (Plaza de la Puerta de la Paz Celestial) con el monumento a los Héroes de Pueblo, el Mausoleo del Presidente Mao, el Palacio de los Museos y el de la Macro Asamblea Nacional del Pueblo, como edificios más importantes. Mucha, mucha policía por aquí y millones de chinos que vienen en peregrinación a los lugares de culto a la revolución. Es el símbolo de la capital y aparece en los billetes o en las gorras de la policía. Lugar habitual de paseo, de charla, o de manifestaciones de los pekineses. Cuesta imaginar esta enorme plaza llena de gente aunque nos cuenta Yolanda cómo funciona el aparato para movilizar al personal en las grandes ocasiones.

Desde allí nos dirigimos a la Ciudad Prohibida o Palacio Imperial, un conjunto de edificios, jardines, palacios, lugares de culto y demás que estuvo reservada a la familia imperial durante varios siglos. Recorremos esta ciudadela recordando la película “El Último Emperador” y deteniéndonos en el Palacio de la Suprema Armonía y fotografiándonos en los símbolos culturales e imperiales (dragón, tortuga, escalinatas de piedra…). Paseamos por el exterior de una sucesión de Pabellones que se corresponden con los Palacios de la Perfecta Armonía, Armonía Protectora, Pureza Celestial, de la Tranquilidad Terrestre… y dejamos de lado los otros Pabellones en el otro Ala que se corresponden con Museos varios. A lo lejos se observa la Colina de Carbón, (montaña artificial formada con el carbón utilizado en la Ciudad Prohibida), jardín que servía de protección al Palacio Imperial de los vientos del norte. En lo alto se ven algunos hermosos pabellones y la Pagoda blanca del mal llamado Palacio de Invierno.

A la salida, por el lado opuesto, advertimos las enormes dimensiones del conjunto, el gran foso que lo delimita y la imponente muralla que lo protege. En ese mismo lugar chocamos con los primeros vendedores agresivos (libros, relojes, souvenirs).

Por allí cerca nos recoge nuestra furgoneta particular que nos llevará hasta el hotel de nuevo. Esta noche cenamos, casi a ciegas, en un restaurante cercano, con nombre de sala de masajes o de algo más fuerte: Relax. Lo primero que he comprobado en este primer día es que los chinos, salvo en grandes hoteles, no hablan inglés y yo creo que tampoco saben chino mandarín: no se enteran de nada. Pero aquí se esfuerzan y al menos les hemos caído bien. La cena, con el hambre que traemos, nos sabe a gloria. La cerveza china, muy buena aunque hay que pedirla congelada. Esto lo hemos aprendido muy bien. Pi jiú (cerveza). Pin tá. (fría). Será una de las frases que más repitamos durante estos días.

jueves, 19 de marzo de 2009

Con la Iglesia hemos vuelto a topar

Esta vez habría que decirlo al revés porque es la Iglesia la que topa, la que embiste. Por eso me siento obligado, en legítima defensa, a escribir sobre la campaña de la Iglesia católica española que no se sabe bien contra qué es, si es contra la nueva ley del aborto, contra el gobierno de Zapatero, contra las mujeres que abortan, contra las mujeres en general, contra los que defendemos el medio ambiente, contra los que protegemos a los animales… Lo que no parece es que sea una campaña a favor de la vida porque entonces quedaría muy desacreditada por la historia actual y pasada de los que la promueven que no se les ha visto en igual actitud y despliegue para salvar vidas humanas y sí se han paseado, y han paseado bajo palio, junto a responsables de miles de muertos. Que coincida esta presunta campaña por la vida con las declaraciones del Papa diciendo que el uso de preservativos en África puede agravar el problema del SIDA puede dar risa si no fuera por los millones de muertos que hay todos los años por esta enfermedad.

A mí me parece bien que la Jerarquía de la Iglesia Católica (la Iglesia es otra cosa) haga una campaña entre sus feligreses para adoctrinarlos sobre su concepción de la vida, de la persona y de la sexualidad pero la costosa campaña publicitaria desplegada engañosa, manipuladora y maniquea, hace un flaco favor al debate público, a la convivencia social (ya se está viendo con el follón que se puede montar esta Semana Santa) y desacredita, otra vez más, a los dirigentes de la Iglesia que se alejan cada vez más de la realidad social.

La Iglesia ha fracasado al intentar imponer conductas porque está anclada en la Edad Media. Mucha gente, cristianos incluidos, no hace caso a las consignas de los obispos sobre el matrimonio, sobre las relaciones sexuales… se pasa por el forro la opinión del Papa sobre los preservativos. Y ahí tiene una gran crisis. Siguiendo con el tema de las cofradías, ¿nos imaginamos que los hermanos mayores -creo que hermanas mayores no hay- hicieran extensiva su obligación de difundir la doctrina oficial también en temas como el preservativo y las relaciones extramatrimoniales entre los costaleros y costaleras (que también las hay)?. Por cierto, ahora que se cumple el aniversario de la guerra de Irak, no recuerdo que hubiera en las procesiones que yo ví ninguna expresión de la defensa de la vida. Se me pasarían.

Lo que no es de recibo es que la jerarquía católica quiera imponer en el derecho público lo que no son capaces de imponer en las conciencias de sus afiliados. Y que tengamos que tragarnos, de manera obligatoria, sus homilías propagandísticas, ofensivas e insultantes para los que no opinamos igual, ya que las realizan desde púlpitos mediáticos y con presupuestos sostenidos con fondos públicos.

A mí me parece que ya es hora de una nueva ley que dé más seguridad a las mujeres y a los profesionales sanitarios y que permita mayor equidad en el acceso a esta prestación en el sistema sanitario público y no se establezcan diferencias en función del poder adquisitivo, de la condición social o cultural. La nueva regulación tiene que corregir los errores y las limitaciones de la actual normativa que criminaliza socialmente a la mujer que aborta y discrimina a muchas mujeres que se enfrentan a esta difícil tesitura.

El cambio en la regulación del aborto, convirtiéndolo en un verdadero derecho de la mujer a decidir si quieren o no ser madres y en qué momento de sus vidas, debe ir acompañado de avances en políticas de educación afectivo-sexual y anticonceptiva para reducir el número de embarazos no deseados, que son una fuente importante de ansiedad y conflicto para muchas mujeres. La Iglesia, en este aspecto, prefiere la hipocresía.

La Iglesia sabe que el aborto, según la Organización Mundial de la Salud es “la interrupción del embarazo antes de la viabilidad fetal”, estableciendo por tanto una diferente protección de la vida en gestación en función de la viabilidad fetal. La Iglesia sabe que el preservativo evita muertes, (aparte de embarazos no deseados), la Iglesia sabe que el verdadero amor se da en parejas de todo tipo, la Iglesia sabe dónde está la defensa verdadera de la vida humana. La Iglesia sabe y entiende, entonces ¿por qué dice lo que dice y por qué hace lo que hace?

domingo, 15 de marzo de 2009

Negando las evidencias

Todavía resuenan los ecos de la cumbre de negacionistas y escépticos del cambio climático en Nueva York en la que se ha arremetido contra el ecologismo y se ha culpado al IPCC de agravar la recesión con sus informes sobre el calentamiento del planeta. Cantos a la libertad de mercado y a la utilización de la energía nuclear han sido la banda sonora del encuentro de think tank neocons con eslóganes del tipo “tenemos que salvarnos de los ecologistas para salvar el planeta” o “Vamos a ir de cabeza de la recesión a la depresión”. En ausencia de JoseMari Aznar, el checo Vaclav Klaus, presidente rotatorio de la Unión Europea, lideró la Cumbre y soltó, entre otras, la siguiente perla : “las energías renovables son equipamientos improductivos movidos por el viento, el sol y similares”. Qué buena razón para movilizarnos frente a estas ideas en las próximas elecciones europeas de junio.

Mientras tanto siguen llegando estudios, datos e informes de todos los rincones del mundo sobre los efectos del cambio climático. Destaco dos que me han llamado la atención de las noticias que me han llegado esta semana.

Terremotos glaciares se han duplicado en última década por cambio climático.

El número de terremotos glaciales se ha duplicado en esta década debido al cambio climático y la tendencia apunta a que crecerán "de forma exponencial", según ha advertido Pedro Elosegui, científico del Instituto de Ciencias del Espacio (CSIC-IEEC). En los últimos quince años se han contabilizado hasta 200 terremotos, aunque en esta década la cifra se ha duplicado y sigue creciendo a un ritmo exponencial. En su opinión, el calentamiento global está causando la pérdida de las grandes masas de hielo glaciar y continental en todo el planeta, aunque la situación está siendo "especialmente dramática en Groenlandia, cuyo casquete glaciar continental contiene el 10 por ciento de las reservas de agua potable de la Tierra, la segunda mayor reserva mundial".

Elosegui es uno de los científicos españoles que ha estudiado la dinámica del flujo de los glaciares en el suroeste de Groenlandia y su conexión con el cambio climático, mediante la utilización entre otros, de receptores GPS a lo ancho y largo del glaciar Helheim. Los nuevos terremotos recientemente descubiertos "muestran una gran estacionalidad, siendo más frecuentes durante los últimos meses de verano, cuando el deshielo en superficie es mayor".


Un leve aumento en la temperatura del planeta podría bastar para que se destruya gran parte de la selva amazónica.

Según el informe, elaborado por la Oficina Meteorológica Británica, buena parte del bosque tropical podría perderse si el termómetro se eleva unos pocos grados centígrados y se mantiene de ese modo durante un siglo.

Los resultados de esta proyección, basada en un modelo climático simple, muestran que incluso los cálculos más conservadores sobre el calentamiento global podrían tener un dramático impacto en la Amazonía, que produce el 20% del oxígeno de la Tierra.

Los países de la Unión Europea se han comprometido a limitar el incremento de la temperatura del planeta a dos grados, pero tan sólo este aumento podría hacer desaparecer hasta el 40% del bosque tropical si perdura 100 años, mientras que un incremento de tres grados -lo que muchos científicos creen que sucederá- podría arrasar tres cuartos de la selva amazónica.

¿20 años no es nada?

He asistido esta semana al arranque de las actividades conmemorativas del vigésimo aniversario de la Ley de Espacios Naturales Protegidos de Andalucía que se han iniciado con un acto en el Pabellón del Futuro, en la Isla de la Cartuja de Sevilla. La Consejería de Medio Ambiente ha diseñado un completo programa de actividades para celebrar este aniversario y quiere aprovechar esta efemérides para iniciar un proceso de amplio debate que conduzca a la aprobación de una nueva Ley que mejore el modelo de gestión vigente y se adapte a los desafíos que plantea el Cambio Global. Lejos queda aquél 18 de julio, (vaya fecha para promulgar una ley en defensa de la naturaleza), de 1989 y aquellos años en los que trabajábamos con pares de fotografías aéreas que me dejaban bizco y realizábamos cartografías temáticas coloreando planos manualmente con unas enormes mesas. Aunque ya hablábamos de ecodesarrollo (el término que luego fue generalmente sustituido por desarrollo sostenible sobre todo a partir de la Cumbre de Río) éramos calificados como los de los “pajarillos” (en Granada y en Sierra Nevada también nos denominaban los preocupados por las “planticas”). Entonces se cuestionaba si los parques naturales permitirían la continuidad de las actividades tradicionales y ahora somos los que en mayor medida las fomentamos, impulsamos y subvencionamos. Ahora el “problema” es que nos hemos convertido en el freno a que el modelo fracasado de desarrollo urbanístico se extienda a nuestros espacios naturales. Ya quedan pocos que crean que en los parques naturales se sueltan víboras y lobos desde helicópteros pero se siguen escuchando discursos plagados de demagogia y de cinismo por algunos lugares de nuestra vasta Andalucía contra las políticas de conservación de espacios y de especies. Recuerdo que la primera iniciativa parlamentaria a primeros de los ochenta para dotar de una figura de protección a Sierra Nevada, (proyecto de parque nacional de la Cabecera del Genil), terminó con un diputado granadino agredido que tuvo que ser rescatado por la Guardia Civil en un pueblo de la zona nor-occidental de la Sierra, (para más señas a sus paisanos se les conoce como "los Azadones"). Años después cuando ya Cazorla y Grazalema eran parques naturales, esos mismos vecinos impidieron que la Agencia de Medio Ambiente pudiera organizar un viaje con empresarios a esos lugares para conocer sus experiencias, “vayamos a que se contaminaran”. La celebración del 20 aniversario, nos permitirá debatir sobre estos temas y tendremos la oportunidad de volver a mostrar nuestro extraordinario patrimonio natural todavía desconocido y no suficientemente valorado por mucha gente. Destaco varias frases del discurso pronunciado en el acto por la “jefa”, Cinta Castillo, mi Consejera, que resume el contenido del mensaje de la Consejería de Medio Ambiente: “La necesidad de elaborar esta nueva normativa se sustenta en las previsiones que advierten de que un porcentaje elevado de los ecosistemas y de la biodiversidad de las áreas protegidas españolas se verán fuertemente afectadas por los efectos del cambio climático y otros componentes del cambio global". . "Las áreas protegidas siguen siendo necesarias, pero no suficientes por sí solas para conservar la biodiversidad en un mundo cambiante, por lo que se hace necesario elaborar un nuevo modelo que asegure la conservación de la integridad ecológica y la biodiversidad de los Espacios Naturales de Andalucía, entendiendo que la biodiversidad de la región tiene su base en la integración humana en el territorio”. En estos veinte años han cambiado muchas cosas en nuestra tierra. Andalucía que fue pionera en las políticas ambientales, sobre todo en la “línea verde”, creando hace dos décadas una ambiciosa Red de Espacios Naturales Protegidos, tiene ahora ante sí el reto y la oportunidad de volver a liderar esta cuestión proyectando la normativa y las medidas de gestión necesarias para adaptarnos al nuevo escenario socioeconómico y de cambio global que vivimos. Nota: En Sierra Nevada, además del 20 aniversario de la declaración de parque natural, celebramos el décimo cumpleaños de la creación del parque nacional por lo que disfrutaremos de un especial y complementario programa de actividades del que ya daré cuenta.

domingo, 8 de marzo de 2009

Día INTERNACIONAL de la Mujer

He escuchado en muchas ocasiones que el nacimiento del Día Internacional de la Mujer, estaba vinculado al incendio ocurrido en una industria textil en Nueva York, provocado por el propio empresario y que produjo la muerte de las 129 trabajadoras declaradas en huelga que estaban encerradas en la fábrica de "Triangle Shirtwaist Company". En algún momento yo mismo creí confiado en este origen.

En realidad fue la II Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas, reunida en Copenhague, en 1910, la que proclamó el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, a propuesta de la dirigente comunista alemana Clara Zetkin, como una jornada de lucha por los derechos de las mujeres. La propuesta fue aprobada unánimemente por la conferencia de más de 100 mujeres procedentes de 17 países, entre ellas las tres primeras mujeres elegidas para el parlamento finés. Cuando se celebró el primer Día Internacional de la Mujer, al año siguiente, más de un millón de mujeres participó públicamente en él. Además del derecho a voto y a ocupar cargos públicos, demandaban el derecho a trabajar, a la enseñanza vocacional y el fin de la discriminación en el trabajo.

En la actualidad la igualdad entre los sexos se ha establecido como una de las prioridades de las organizaciones internacionales, habida cuenta de que las mujeres y las niñas constituyen las tres quintas partes de los mil millones de habitantes más pobres de la Tierra, de que las mujeres representan los dos tercios de los 960 millones de adultos analfabetos del planeta, y de que el 57% de los 77 millones de niños sin escolarizar en el mundo son, de hecho, niñas. El desarrollo sostenible y la causa de los derechos de la paz sólo pueden progresar a nivel mundial, regional y local, si los hombres y las mujeres gozan de posibilidades de elección y oportunidades amplias e iguales, y si pueden vivir con libertad y dignamente.

Sin duda somos uno de los países en los que más se ha avanzado en igualdad y aunque quedan muchas cosas que hacer todavía para alcanzar la igualdad real entre hombres y mujeres en España, creo que tenemos una obligación política, moral, ética de recuperar la dimensión internacional de esta celebración y mirar con ojos solidarios hacia el resto del mundo y muy especialmente a los países más pobres, hacia las mujeres sin voz.

sábado, 7 de marzo de 2009

Aznar no liderará la Cumbre de Escépticos


Aznar se ha caído de la Cumbre. ¿Se habrá caído del caballo?

Nunca creí que fuera a felicitar a Aznar por algo. Aunque el motivo ha sido una rectificación, no sé todavía si sincera o estratégica, si es un cambio de opinión definitivo o sólo una maniobra por la que le estaba cayendo desde dentro y fuera de su partido; a estas alturas todavía no sabemos si ha sido una decisión libre o si ha sido forzado por la actual dirección del PP, incluso si ha sido la Botella la que se lo ha sugerido.

El caso es que JoseMari Aznar se ha borrado de la cumbre negacionista del cambio climático y el PP ha celebrado la marcha atrás de su líder, que era uno de los cabezas de cartel del mayor congreso de escépticos y negacionistas del cambio climático que comienza este domingo en Nueva York.

Algunos niegan que Aznar hubiera aceptado nunca la invitación para participar. El Instituto Heartland, organizador del Congreso financiado por una poderosa petrolera, sin embargo, ha mantenido durante un mes al líder conservador en su lista de ponentes confirmados. Y Aznar, cuya fotografía figuraba en el cartel de la cumbre, nunca ha desmentido su presencia en Nueva York el 8 de marzo.

La retirada de Aznar no impedirá la celebración del Congreso. Del 8 al 10 de marzo, el presidente polaco Klaus y compañía rechazarán que el calentamiento global provocado por el ser humano sea "inequívoco y evidente", como certifica el IPCC de Naciones Unidas. La entrada es libre, para el que quiera oírles.